20 cosas que sólo los provincianos viviendo en la CDMX entenderán

Llegaste desde muy lejos y te sigues enfrentando a esto.

1. Tratas de comunicarte con palabras que has usado toda la vida y nadie te entiende. "¿Bichi? ¿Qué es eso?"

2. Como todo nostálgico, vas a restaurantes que DICEN vender comida de tu estado, pero cuando llegas...

3. Cuando vas a tu ciudad, el 80% de tu maleta se compone por comida de allá. Carne, queso, café y hasta tuppers con comida de tu ma.

4. Obvio, también les llevas en ofrenda cosas que en tu pueblo no venden.

5. ¿Cine? ¿Para qué? En el camión te pasan los mejores estrenos (de hace una década).

6. Llevas casi diez años viviendo en la CDMX, pero tu familia te sigue preguntando si ya le entiendes al metro y si te han asaltado.

7. ¿Espacio personal? Ah, claro, lo tienes guardado en los recuerdos de tu infancia.

8. Cuando te dicen que algo está cerca, imaginas 15 minutos, pero te embarcas en una aventura de 30 minutos de metro, 20 de combi y 20 caminando.

9. En tu pueblo o ciudad, le dicen "México" a la CDMX.

10. Si eres norteño, te dicen que hablas gritado; si eres de la costa, esperan que hables como El Ferras.

11. Nunca pierdes la oportunidad de decirles a los defeños que, para climas extremos, los de tu ciudad. "¿Esto te parece frío? ¡Frío el de Chihuahua!"

12. Dejaste tu cuartote con clóset y un gran patio para venir a conquistar tus sueños.

13. Ésta es tu cara cuando tu mamá te cuenta que cocinó tu platillo favorito.

14. El cuarto donde pasaste tus maravillosos años de infancia es ahora una bellísima bodega.

15. Los domingos quieres hacer algo con tus amigos no foráneos, pero todos están en casa de sus papás.

16. Estás harto de la cábula de las quesadillas con o sin queso.

17. Has aplicado varias veces la de llevarte a la escuela o a la oficina tu maleta, para no perder tiempo.

18. ¿Vivir al extremo? Bitch, please, tú has tratado de conseguir un boleto para viajar a tu ciudad en plena Navidad.

19. Tus roomies se han convertido en tu familia.

20. Y lo mejor que te puede pasar en una fiesta es encontrarte a alguien de tu estado, que se convierte inmediatamente en tu carnal.