Quizás te suene un poco alocado, pero llevar a tu mascota en moto es completamente legal en el país. Eso sí, siempre que el animal no interfiera de ninguna forma con el manejo seguro del conductor. Pero además de lo que dice la ley, también hay que tomar en cuenta algo aún más importante: la seguridad y comodidad de tu mascota.
Si vas a hacer un recorrido en moto con tu amigo peludo, asegúrate de que tomas las medidas necesarias para que no corra ningún tipo de peligro. ¿No sabes cuáles son? Hoy te contamos todo lo que sabemos al respecto.
Recorre distancias cortas
La decisión de llevar a tu mascota en una moto puede deberse a distintas razones, como una visita al veterinario o un paseo por el campo, asumiendo que la motocicleta es tu único medio de transporte. En ese caso, lo más recomendable es que tus trayectos sean los más cortos posibles.
Esto es importante porque a pesar de que tomes todas las medidas preventivas, sigue siendo un poco riesgoso de hacer. Así que nuestro consejo es que consigas destinos muy cerca de tu hogar que cumplan con la función que buscas.
Evita realizar viajes largos con tu mascota. Además del tiempo y la distancia, las velocidades que suelen utilizarse en la carretera pueden ser muy incómodas y aterradoras para ellos.
Ten en cuenta el peso y el tamaño de tu mascota
Mientras más grande sea, más difícil de transportar. De hecho, para animales grandes es indispensable el uso de un Sidecar, en donde debe ir amarrado de forma que no le permita salir del lugar.
Los animales un poco más pequeños pueden transportarse en mochilas o trasportines homologados, que debes adquirir según el tamaño de tu mascota. Las mochilas son ideales para animales livianos que puedas llevar en tu espalda sin problemas. Mientras que los trasportines serán útiles para ti si tu mascota no es tan grande, pero pesa un poco. Estos se colocan bien asegurados en la parrillera de la moto.
Acostúmbralo poco a poco
Para que tu mascota se sienta cómoda cada vez que realizas estos paseos será necesario que practiques mucho antes de hacerlo definitivamente. Preferiblemente, empieza a montarlo en la moto desde sus primeros meses (3 a 4 meses).
Empieza con distancias muy cortas y a una velocidad excesivamente baja. Intenta hablarle durante todo el camino, haciéndolo sentir bien y seguro. Semana a semana puedes incrementar la distancia y la velocidad hasta llegar a la deseada. Verás cómo tu mascota se convierte progresivamente en tu mejor compañero en la vía.
Consigue los accesorios necesarios
De la misma forma como te proteges a ti mismo de posibles accidentes, no puedes dejar desprotegido a tu mejor amigo. Hay accesorios especiales para ellos que puedes conseguir en tiendas de mascotas o en la red.
Consigue un casco con seguro y unos lentes con cinta para sujetarse a la cabeza a su medida. Los lentes lo resguardarán del sol y de la brisa, mientras que el casco puede protegerlo de una lesión mortal.