Si eso no funciona, busca un libro de geometría. Hojéalo hasta encontrar algo que se vea similar a tu propia cara.
Si eso no funciona. Consigue un transportador y mide cada ángulo de tu cara hasta que des con la forma. Recuerda, un rombo es cuadrilátero con cuatro lados que tienen la misma longitud.
Si todavía no puedes relacionar tu cabeza humana en una categoría de forma de caras, ¿supongo que puedes usar el peinado que quieras?