1. Un local que solía ser usado para otros propósitos.
Como un parque, una estación del metro, o un baño público.
2. Algún tipo de tema novedoso.
Las opciones incluyen un tugurio, un juego de video de los 80, el lejano oeste americano, o "la guerra" (no importa cuál guerra, cualquiera servirá).
3. Bombillas desnudas de Edison.
4. Muebles antiguos al azar que no combinan entre sí.
5. Y cajones de cerveza como asientos y paletas como mesas en el exterior.
Tan fantásticos cuando llevas puesta una falta.
6. Precios como “5½” en el menú porque NUNCA pueden mostrar la moneda de circulación.
7. Cerveza servida en frascos de conserva.
8. Macarrones con queso como el refrigerio del bar.
9. Cervezas con nombres tontos.
Que tienes que repetir muchas veces en el bar por la música muy alta.