Ya sabemos que cocinar saludable ya es bastante difícil, pero es aún peor cuando apenas y sabes cocinar, PUNTO.
1. Primero lo primero, no optes por una transformación total. Empieza con algo pequeño, y ponte como objetivo cocinar más saludable algunas noches por semana.
2. Y elige recetas sencillas que requieran pocos ingredientes.
3. Compra yogurt griego y úsalo para todo lo que requiera de crema agria o algún tipo de dip.
4. Usa caldo para saltear o sofreír tu comida en lugar de aceite.
5. E intenta cocinar arroz integral o quinoa, en lugar de arroz blanco.
6. Aprende a preparar huevos. Son un alimento y hasta una botana increíblemente fácil de hacer, y es alto en proteínas.
7. No subestimes el poder de los productos enlatados.
8. Pon muchas cosas en un recipiente y ásalas.
9. Prepara porciones grandes de desayuno que puedas colocar rápidamente en el microondas, para que no te tardes mucho tiempo en cocinar.
10. O experimenta con avena remojada durante la noche.
11. Compra ingredientes precocinados, como pollo rostizado, que puedes colocar en múltiples comidas durante la semana.
12. O invierte en un procesador de alimentos o licuadora que te ahorrará mucho tiempo al preparar una receta.
13. Cuando cocines, intenta hacer el doble de la receta.
14. O corta previamente el doble de vegetales y carne de lo que dice la receta.
15. Y luego, cuando limpies, separa las sobras en porciones individuales que puedas congelar y comer en otras comidas.
16. Compra bolsas de vegetales congelados o cajas grandes de verduras y coloca un poco en cada receta que prepares.
17. Y trata de disminuir la cantidad de azúcar y endulzante que añades a cosas como el té, café y avena.
18. Saca tiempo de tu agenda para ir de compras a la tienda o al super al menos un día a la semana.
19. Pero si eso no parece factible, considera un servicio de suscripción a un lugar de comida sana o elige tus ingredientes en línea y pide que te los entreguen a domicilio.
20. Invierte en una olla de cocción lenta, en la que puedes colocar los ingredientes antes de irte al trabajo, y tener una comida lista esperándote al regresar a casa.
21. Por último, pero no menos importante, dedica algo de tiempo a planear tus comidas al inicio de la semana y toma en consideración tus planes de salir y lo que puedes hacer.
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Este post fue traducido del inglés. Las respuestas han sido editadas por cuestiones de extensión y claridad.