1. Lograr que dos niños vean a la cámara al mismo tiempo es casi imposible.
2. Al principio las cosas se ponen más que un poco abrumadoras.
3. De hecho, no todos piensan que estás preparada para el reto.
4. Tu horario se vuelve mucho más ocupado.
5. Alistarse para salir de casa toma tanto tiempo que casi parece que ni vale la pena salir.
6. Los cambios de pañal tiene que ser tan rápidos como el rayo porque no es buena idea dejar a tu otro hijo solo durante mucho tiempo.
7. Estarás alimentando a alguien desde que amanece hasta que anochece. Y después, uh, durante el anochecer también.
8. Durante el día tu hijo mayor despertará al bebé...
9. Y durante la noche tu bebé despertará al mayor...
10. También, las siestas sincronizadas son un mito.
11. Si tienes un niño y una niña la gente te preguntará si "ya acabaste", y si tienes dos del mismo sexo la gente te preguntará si "buscarás el niño/niña."
12. Encontrar una niñera no es tan fácil como cuando tenías un hijo.
13. Tu casa parecerá nunca estar limpia sin importar cuanto la limpies.
14. La ropa sucia se acumular mucho más rápido que antes también.
15. Si una persona en tu casa se enferma de resfriado, a todos les da.
16. Tienes muy poco espacio en tu carrito del supermercado para comida.
17. Pasaste de ser más que tu hijo a tener tantos niños como adultos en la casa.
18. No irás "con todo" con tu segundo hijo como lo hiciste con el primero.
19. Ni comprarás todos los productos de moda.
20. Si quieres ir de viaje deberías considerar hacerlo antes de que tu pequeño cumpla dos años.
21. Aún si al mayor de verdad le gusta el pequeño, ellos probablemente dirán algo como, "¿Cuando se devuelve?" al menos una vez.
22. Nunca nada será tan tierno para ti como oír a tus hijos reírse juntos.
23. Y por último, dos hijos equivale al doble de amor.
