14 "Vacaciones" que los padres toman todos los días

Ir al supermercado sin los niños se siente como una semana en Jamaica.

1. Cuando eres la primera persona de la familia que se despierta.

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Esos ocho minutos antes de que los niños entren disparados a la cocina pidiendo el desayuno, ¡son tuyos y de nadie más!

2. Echarle gasolina a tu auto.

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Esos 90 segundos cuando los niños están dentro del auto y tu estás afuera, ofrecen una oportunidad maravillosa para relajarte. Respíra hondo (pero no demasiado, ya sabes, la gasolina) y deja que tus problemas se desvanezcan.

3. Estar esperando que el banco te conteste la llamada.

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Tus niños por lo general saben que tienen que dejarte tranquila cuando estás al teléfono, así que, siéntate, relájate y disfruta la versión repetitiva de "Waterfalls."

4. Esperar en una cola sin tus niños.

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Esa larga cola en la farmacia es un alivio del mundo si tus niños están en casa con alguien más. ¡Disfruta de ese rock suave del ambiente musical que ahoga la tos persistente del hombre que está detrás de tí!

5. Cuando tus niños creen que están en problemas.

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Tu caótica casa será transformada en un centro de relajación a medida que ¡de pronto tu silencioso hijo camina de puntillas a tu alrededor!

6. La hora de la siesta.

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El momento en que tu bebé se queda dormido se siente tan liberador como mojar tus pies en el agua de Waikiki. ¡No te quedes atrapada debajo de tu bebé o toda tu mini-vacación ocurrirá en el mismo lugar!

7. Los seis minutos después de que tu niño abre un juguete nuevo.

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Esos momentos preciosos antes de que tu niño eche a un lado el juguete y exija tu atención, ¡son tuyos para que los disfrutes como quieras! ¡Ponte creativa!

8. Cuando está al aire un nuevo episodio del programa favorito de tus niños.

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En la próxima media hora te sentirás como si estuvieras en un café parisino, mientras tomas café y navegas en la red. ¡Hasta podrías tratar de leer algunas páginas de un libro!

9. Ir al baño.

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Garantizado, la mayoría de los viajes al baño son interrumpidos por visitas de los niños pidiendo algo que comer, pero en esos raros casos en que te dejan tranquila, ¡esto es 100% tiempo para tí!

10. Cuando tu niño va al baño.

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Esta es una oportunidad gloriosa para ocuparte de tí, pero está prevenida: la mini-vacación puede terminar abruptamente cuando tu niño grite: "¡mami, papi, necesito ayuda!"

11. Un viaje al supermercado sin los niños.

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Pasear despreocupadamente por los pasillos, sin tener que decir ni una vez "¡DEVUELVE ESO!" es casi tan relajante como un día de spa en el Valle de Napa. ¡Obséquiate una muestra gratis!

12. Cuando el niño piensa que se está saliendo con la suya.

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Sabes que están jugando con tu iPad después de haberles dicho que estaba prohibido, pero lo están haciendo tan calladitos que no te importa. ¡Disfruta la tranquilidad!

13. Recoger la correspondencia.

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Una vez que la puerta del frente se cierra detrás de ti, ¡tienes 15 pasos libres de niños hasta el buzón para disfrutar! ¡Y luego un bono de 15 pasos más de regreso!

14. Después de que los niños se van a dormir.

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Asumiendo que no tienes que pasar este tiempo haciendo todo lo que no pudiste hacer durante el día por que tus hijos estaban encima de tus asuntos, ¡puedes ponerte cómoda como si estuvieras paseando en una góndola en los canales de Venecia! ¡Regocíjate!