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    14 Terroríficos tratamientos médicos que realmente solían existir

    Qué bueno que la ciencia ha evolucionado a través de los años.

    1. Sangría

    Una sangría es un proceso que saca una gran cantidad de sangre, a menudo haciendo una incisión en la vena del antebrazo, pero también se utilizaban sanguijuelas y ventosas. Los doctores creían que la enfermedad era provocada por un desequilibrio en los fluidos corporales, y sacar sangre restablecería ese equilibrio. Sí, ¡claro!

    La sangría se utilizaba para tratar todo tipo de cosas, desde la plaga y la viruela hasta la epilepsia. La práctica comenzó con los antiguos egipcios y continuó siendo un tratamiento popular hasta el principio del siglo XIX, a pesar de los avances científicos significativos de la medicina. No prevaleció en el siglo XX, ya que los doctores se dieron cuenta de que la pérdida de sangre solo hacía que los pacientes se enfermaran más... o los mataba. También es, quizás, la verdadera razón por la que George Washington murió.

    2. Trepanación

    La trepanación implica perforar o taladrar un agujero pequeño en el cráneo para exponer el cerebro. Las evidencias muestran que la trepanación existía incluso desde la era neolítica y se realizó hasta el siglo XIX, a menudo, sin anestesia o medicamentos para el dolor.

    Aparentemente la utilizaban tanto los doctores occidentales como los médicos tradicionales o religiosos para tratar la histeria o la sicosis. Con el tiempo, los doctores se dieron cuenta de que este procedimiento traumático no era un tratamiento psicológico efectivo, y desapareció en la primera década del siglo XX. Todavía en la actualidad existen formas modernas de trepanación, pero los neurocirujanos la practican para aliviar temporalmente la presión del cerebro producida por la hinchazón o el sangrado.

    3. Cocaína

    4. Hemiglosectomía

    5. Orinoterapia

    6. Cloroformo

    El cloroformo, el "roofie" original, se utilizó por vez primera para anestesiar en 1831 y se volvió la anestesia más popular para cirugías y partos. Los pacientes olían un paño empapado en cloroformo para quedar inconscientes para la cirugía, y posteriormente los doctores diseñaron una máscara que liberaba una dosis constante de cloroformo de modo que los pacientes permanecieran inconscientes a lo largo de la operación.

    En teoría, esto era fantástico, porque, antes de la anestesia, la cirugía era, literalmente, una tortura, pero se presentaron muchas complicaciones y una elevada tasa de mortandad. Los doctores dejaron de usar cloroformo en la década de 1950 cuando descubrieron anestésicos más seguros como el gas de óxido nitroso.

    7. Vomitivos

    8. Sanguijuelas

    Las sanguijuelas se han utilizado durante miles de años para sacar sangre, comenzando con los antiguos egipcios y hasta el siglo XIX. Los doctores creían que la inflamación de los órganos provocaba la mayoría de las enfermedades y que sacar la sangre era la única cura, así que colocaban sanguijuelas en la parte del cuerpo donde se localizaba el órgano (como los ojos, la boca, los oídos, la vulva y el pene).

    Algunos doctores incluso ataban un cordel a la sanguijuela, como una correa, de modo que pudiera entrar por el recto, la vagina o la boca y sacar la sangre sin escaparse. En el punto máximo de la popularidad del uso de las sanguijuelas en la Europa del siglo XIX, los doctores tenían "criaderos de sanguijuelas" o estanques donde criaban miles de Hirudo medicinalis, una especie única de sanguijuelas no agresivas que resultaban perfectas para uso médico. Para el siglo XX, el uso de las sanguijuelas disminuyó en popularidad debido a que en realidad no funcionaba y, a menudo, provocaba más problemas, además de que pegarte sanguijuelas en el rostro suena extremadamente espantoso.

    9. Lobotomía

    10. Jarabes calmantes (cocteles de narcóticos)

    A finales del siglo XIX los farmacéuticos patentaron jarabes calmantes para la dentición y para los niños inquietos, que incluían ingredientes como morfina, codeína, cannabis, cloroformo, metanfetaminas y alcohol. Las dosis eran lo suficientemente bajas como para detener el dolor de la dentición y lo suficientemente elevadas como para noquear a los niños, así que, a menudo, las madres utilizaban los jarabes para poner a dormir a sus irritables bebés.

    No es de sorprender que muchos bebés y niños pequeños terminaran con sobredosis, cayendo en coma o muriendo. Así que estos jarabes, al igual que el muy popular jarabe de la señora Winslow, fueron eliminados del mercado para bien para la década de 1930, lo cual es algo bueno, porque el "sizzurp" no es nada comparado con lo que los niños estaban bebiendo a sorbos en 1900.

    11. Heroína

    12. Mercurio líquido

    13. Arsénico

    14. El cinturón eléctrico