Admitámoslo: tu móvil está literalmente cubierto de gérmenes.
Lo utilizas sin parar y te acompaña básicamente a todas partes (incluso al baño). Es asqueroso. Algunos estudios han demostrado que la mayoría de los móviles dan positivo en microbios que pueden provocar enfermedades y en materia fecal (vamos, caca). Y como estás constantemente tocando tu móvil, toda esa porquería puede ir a parar directamente a tu cara.
En pocas palabras: tu móvil es un portador de gérmenes portátil.
¿Crees que desinfectar es tan sencillo como pasar una toallita antibacteriana y que leer esta publicación es una pérdida de tiempo?
INCORRECTO. Las toallitas antibacterianas y los desinfectantes son, en realidad, muy abrasivos y pueden dañar o rayar tu móvil.
Esta es una forma segura de desinfectar tu móvil, mucho menos abrasiva pero aun así efectiva a la hora de eliminar gérmenes.
Paso 1: Rellena un pulverizador hasta la mitad con agua destilada o embotellada.
Paso 2: Rellena la otra mitad del pulverizador con alcohol isopropílico al 70 %.
Paso 3: Enrosca la tapa y agita el pulverizador para mezclar la disolución.
Paso 3: Pulveriza *LIGERAMENTE* la disolución en un paño de microfibra o sin pelusas.
Pasa el paño por todo el móvil, ¡sobre todo por los botones!
Importante: Esto es para una desinfección semanal, no diaria.
Abusar de esta disolución puede provocar daños leves en la capa protectora de la pantalla, así que no deberías hacerlo más de una vez por semana. Para la limpieza diaria puedes simplemente usar un trapo sin pelusas (lo cual recomienda Apple).
¿De verdad funciona este método? Tomamos una muestra de un móvil y cultivamos bacterias antes y después de la limpieza para descubrirlo.
Esto es lo que se formó en las placas de Petri tras 5 días:
