1.
Con frecuencia te golpeas las caderas con mesas, vasos llenos de líquido, o puertas pesadas puertas.
2.
Encontrar un bikini que te quede bien a menudo significa comprar aparte las piezas de arriba y de abajo, que son de diferentes trajes de baño.
3.
Abordar un vuelo lleno sin golpear con la cadera a un extraño al azar, es más o menos imposible.
4.
¿Intentando salir de tu asiento en un cine lleno? Sí, probablemente la cara de alguien se habrá llenado de trasero.
5.
Tienes una relación odio/odio con las fajas.
6.
Pasas mucho tiempo buscando en Google como vestir tu cuerpo.
7.
Conseguir un abrigo que se ajuste a todas las partes de tu cuerpo al mismo tiempo, requiere la ayuda de MacGyver.
8.
Las faldas amplias te hacen parecer como la parte superior de un cubilete.
9.
No estás realmente preocupada por no tener un espacio entre los muslos.
10.
Los vestidos holgados son un boleto cerrado para verse bastante cuadrada.
11.
Cuando corres, te mueves tanto que casi necesitas un cinturón de seguridad para tu cuerpo.
12.
No compras absolutamente nada sin probártelo.
13.
...Aunque tengas rabia, al menos dejaste un vestidor.
14.
Comprar en línea significa tener que comprar dos tallas de todo.
15.
Los pantalones no te sientan igual por delante que por atrás.
16.
No entiendes por qué las tiendas de ropa suponen que la gente que tiene curvas son todas de la misma estatura.
17.
Todos tus pantalones vaqueros son elásticos, así que tan solo tienes unos cuantos usos, antes de que tengas el trasero caído.
18.
Cuando llevas tus shorts, de forma mágica, siempre se convierten en ropa interior.
19.
Tienes cerca de 20 millones de cinchos, y todos son usados para apretar tu cintura.
20.
Literalmente estas contando los segundos para que vuelvan a estar de moda los vestidos cruzados.
21.
Toda tu ropa siempre se desalinea y necesitas ajustarla.
22.
Cuando encuentras algo que te hace ver y sentir bien, te conviertes en un imparable huracán fabuloso.
