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Estudiar en un colegio de mujeres: estereotipos versus realidad

No todas eran lesbianas.

1. Estereotipo: Era como una gran pasarela de colegialas sexis...

Realidad: no habían chicos, así que a todas les importaba un comino cómo se veían...

2. Estereotipo: eras super malintencionada...

Realidad: menos chicos = menos razones por las cuales pelear...

3. Estereotipo: habían un montón de peleas entre mujeres...

Realidad: la verdad es que no... lo que con más frecuencia sucedía era que llorábamos abriendo nuestro corazón unas con otras...

4. Estereotipo: todas eran lesbianas...

Realidad: bueno, estadísticamente tiene sentido que hubiera más lesbianas. De todas maneras, los chismes de lesbianas eran los MEJORES...

5. Esterotipo: las lesbianas tenían sexo en el baño...

Realidad: ehh... no, ¿Quién haría algo así?

6. Estereotipo: no conociste a ningún chico sino hasta la universidad...

Realidad: conociste ALGUNOS chicos en el autobús...

7. Estereotipo: el feminismo era parte de tu currículum...

Realidad: demasiado cierto... Pero sólo nos dimos cuenta de que lo necesitábamos cuando salimos...

8. Estereotipo: todas piensan que están gordas y sólo comen ensalada...

Realidad: por cada chica a la que le encanta la ensalada, hay 50 que adoran los pasteles...

9. Estereotipo: como no hay chicos, nadie se distrae y todas se concentran muchísimo...

Realidad: como no hay chicos, las chicas son las que hacen bromas de pedorrearse en la última fila...

10. Estereotipo: todas se sentían muy frustradas sexualmente...

Realidad: todos los adolescentes se sentían frustrados sexualmente... En los colegios de mujeres, canalizábamos esa energía haciendo "muros de hombres" en el sala de descanso de la secundaria...

11. Estereotipo: cuando alguien tenía novio, era todo un acontecimiento...

Realidad: era un GRAN acontecimiento... Y todas sabían cada detalle...

12. Estereotipo: las chicas se la pasan hablando sobre su período...

Realidad: sip, TODO EL TIEMPO...

13. Estereotipo: desearías haber estudiado en una escuela mixta...

Realidad: ¡NUNCA!