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    19 daños colaterales inesperados de una mudanza

    Ya sea que te estés mudando a la vuelta de la esquina o al otro lado del mundo, una cosa es segura: tienes más calcetines sin pareja de lo que jamás podrías haber imaginado.

    1. No importa qué tan limpio pensabas que eras, desenterrarás más suciedad, moho y polvo que lo que cualquier ser humano podría haber producido...

    2. Por otro lado, es una manera genial para que finalmente puedas dejar tu casa real y verdaderamente limpia...

    3. Repentinamente, las cajas de cartón se vuelven tan excepcionales y valiosas como los diamantes...

    4. Y el mundo no contiene el suficiente papel de burbujas para lo que tú necesitas...

    5. Descubrirás que tienes aproximadamente 30 calcetines sin pareja...

    6. También verás que, hasta donde llega la vista, tienes 57 cucharas y ningún tenedor...

    7. Y TANTOS CARGADORES PARA NADA...

    8. Del lado positivo, descubrirás tantas cosas que te habías olvidado que tenías, que prácticamente sentirás que fuiste de compras sin pagar nada...

    9. "Empacar" implica que tus cosas deben quedar dentro de un contenedor... y no desparramadas, ¿verdad?

    Incorrecto.

    10. Si estás mudándote con tu pareja, sin duda alguna saldrá a luz la verdadera esencia de ambos...

    11. Empiezas a construir paisajes fantasiosos en tu mente, planificando hasta el último detalle de la nueva casa de tus sueños...

    12. ...solamente para recordar que quizás necesites reducir un poco tus expectativas...

    13. Te volverás brutalmente insensato, capaz de tirar preciosos recuerdos que pensaste que les heredarías a tus nietos...

    14. Pero resultarás sintiéndote inexplicablemente emotivo respecto a tirar cosas que no importan en absoluto...

    15. Sabrás quiénes son tus verdaderos amigos...

    16. También sabrás qué es lo que estás dispuesto a pagar a cambio de tu tranquilidad mental...

    17. Te das cuenta de que no sabes lo que tienes hasta que lo pierdes...

    18. Descenderás hacia un agujero negro de incertidumbre, desesperanza y desesperación; del cual estás completamente seguro que nunca, jamás lograrás salir...

    19. Y, repentinamente, estás en casa...