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    20 Momentos que solo entenderás si no eres puntual

    ¿Tres minutos para ducharte, cepillarte los dientes y vestirte? No hay problema.

    1. Cuando todavía estás en tus pijamas y solo tienes tres minutos antes de que debas salir, pero estás como "está bien".

    2. Cuando pierdes el metro/autobús por una fracción de segundo, y sabes que hubieras llegado a tiempo a tu destino si no hubiese pasado.

    3. O ese glorioso momento cuando tomas el metro/autobús a último momento y no vas tarde al trabajo (para variar).

    4. Cuando te levantaste a tiempo, pero las fuerzas de la naturaleza parecen estar haciendo todo a su alcance para evitar que llegues a la hora.

    5. O cuando te levantaste tarde, pero las fuerzas de la naturaleza han decidido trabajar contigo hoy, así que llegas a tiempo a esa reunión a la que necesitabas ir.

    6. Cuando finalmente apareces en el bar media hora tarde y tu amigo te mira con furia como si lo hubieras traicionado más que su infiel ex.

    7. Cuando estás en una entrevista de trabajo y surge la puntualidad.

    8. Cuando le dices a alguien que estás casi allí, cuando de hecho todavía estás en casa.

    9. Cuando esperas hasta estar afuera para hacer una llamada solo para que haya ruido de fondo.

    10. Cuando intentas entrar al salón discretamente veinte minutos después de que la clase ha empezado.

    11. Cuando juras que esta vez serás puntual, pero aún así llegas tarde.

    12. Cuando estás con tanto retraso que decides que ni siquiera vale la pena aparecer del todo a estas alturas.

    13. Cuando intentas explicar a una persona puntual que no lo haces a propósito.

    14. Cuando llegas a algún lugar a tiempo por primera vez.

    15. Cuando llegas primero y tienes que esperar, porque tus amigos te conocen tan jodidamente bien así que te mintieron sobre la hora de encuentro.

    16. Cuando te alistas frenéticamente porque sabes que debes salir en ese instante.

    17. Cuando eres capaz de inventar una excusa al segundo para justificar tu retraso.

    18. Cuando hay un tráfico horrible y la desesperanza comienza a superarte.

    19. Cuando el tren realmente tiene una avería esta vez, pero usaste esa excusa la semana pasada y ahora nadie te cree.

    20. Y cuando aceptaste el hecho de que siempre llegarás tarde, porque está en tu sangre y finalmente puedes estar en paz contigo.

    Este post fue traducido del francés.