1. Nunca ganas una discusión, porque siempre comienzas a llorar antes de expresar tu opinión.
2. Y nunca pareces sincero cuando lloras por los problemas de los demás.
3. Porque ver a otro llorar sin duda te hará llorar a ti.
4. Pero ver a alguien realmente feliz también te puede hacer llorar.
5. Eres experto en sentir un hormigueo en los ojos y luego no pestañear hasta llegar al baño.
6. Que sean amables contigo cuando estás llorando solo lo empeora.
7. Y abrazarte cuando estás sollozando solo te pone peor.
8. Aunque lo peor es si has llorado pero crees que ya terminaste, te secas los ojos y sigues con tu día. Sin embargo, alguien pregunta luego: "¿Estás bien?"
9. Si estás borracho, hay un millón de probabilidades de que llores más que de costumbre.
10. Pero sabes que llorar con resaca es aún peor que llorar borracho.
11. Y el tipo de llanto más molesto es el llanto frustrado.
12. Nunca has podido enfrentar ni un poquito de un programa de TV o una película sin llorar a gritos.
13. Y hay miles de canciones que te hacen romper en llanto apenas suenan.
14. Pero nada es más arriesgado que leer un libro triste antes de irte a dormir.
15. Siempre llevas contigo un pañuelo.
16. Y, si usas maquillaje, siempre optas por la rímel a prueba de agua.
17. Cada vez que te regañan en el trabajo, aunque sea por lo más mínimo, te pones a llorar.
18. Y leer noticias tristes en tu escritorio nunca deja de afectarte.
19. Nunca logras dormir si sospechas que alguien con quien hablaste durante el día parecía algo deprimido.
20. Pero, bueno, por lo menos estás muy conectado con tus emociones.
