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14 Maneras en las que ir al teatro de niño puede ayudarte cuando eres adulto

¡No dejes que nadie te diga que no vale la pena!

1. Mejora tus habilidades para hablar en público.

2. Aprender el valor del trabajo en equipo.

En la escuela intentan enseñar esta habilidad con trabajos en grupos, pero no es ni la mitad de efectivo. En el teatro, aprendes a comprometerte y colaborar con todo tipo de gente, de lo contrario no hay espectáculo. La gente de teatro sabe, cada individuo es valioso, no sólo las estrellas.

3. Te enseña a tener empatía.

4. Te conviertes en un maestro en el manejo del estrés.

Si puedes aprender a montar un gran espectáculo cuando parece que todo va mal, serás capaz de manejar cualquier trasnochada o carga de trabajo de la universidad. Estarás más tranquilo porque ya sabes que la recompensa vale todo ese estrés.

5. Ganarás confianza.

6. Pero también aprenderás algo de humildad.

Usualmente no hay tiempo para endulzar en el teatro. El espíritu del teatro es colaborativo, pero prepárate para recibir comentarios honestos que debes escuchar con la mente abierta. Aprenderás a aceptar comentarios sobre tus debilidades y trabajar para mejorar sin tomar nada personal.

7. Te enseña a lidiar con el rechazo.

8. Aprenderás a trabajar en plazos limitados.

En la escuela hay exámenes de reposición y extensiones para los proyectos, pero en el teatro el espectáculo debe continuar, estés listo o no. Estar en una obra te enseña (te obliga, en realidad) a encontrar manera creativas de cumplir con los plazos y encontrar atajos efectivos en el trabajo.

9. Es una manera segura de obtener habilidades para leer.

10. Apreciarás más las palabras escritas (y habladas).

El teatro ha enseñado a todo el mundo a través de la historia. Estudiarla te expone a grandes trabajos de literatura e ideas que de otra manera no habrías encontrado. Incluso si no escoges seguir con el teatro el resto de tu vida, hay muy pocas direcciones en la vida que no han sido influenciadas por formas de arte.

11. Te hace más carismático.

12. Tus habilidades para memorizar serán espectaculares.

Es mucho más que solo recordar palabras y señales de iluminación. Los trucos para memorizar de los que dispones, y la manera en que aprendes a hacer varias cosas en el escenario pueden trasladarse a la manera en la que estudias, trabajas y organizas tu mente más adelante en la vida.

13. Desarrolla el hábito de mantenerte físicamente activo.

14. Te enseña profesionalismo en el mundo real.

Para muchos niños, el teatro es su primer contacto con el comportamiento profesional. Tienes que dar una buena impresión, mostrar entusiasmo, trabajar duro, comprometerte, cuidar tus emociones, apoyar a tus compañeros y tratar con respeto a tus superiores. Todas estas son habilidades que debes dominar si quieres ser tomando en serio profesionalmente.