1.
Túmbate desnuda de cintura para arriba y empuja sus lados. Después mira cómo se balancean arriba y abajo.
3.
Usa un sujetador superfino, suave, ligeramente grande para trabajar de vez en cuando.
4.
Posa un tazón de ganchitos sobre ellas.
5.
Delante de un espejo, toca y pellizca tus pezones y mira todas las cosas extrañas que hacen.
6.
Mira en un espejo cómo rebotan durante las relaciones sexuales (o simplemente saltando arriba y abajo).
7.
Échales MUCHA espuma en la ducha.
8.
Échales un poco de perfume.
9.
Apoya un libro sobre ellas para leer.