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Las 21 luchas de tener un nombre imposible

¡Oh, ni siquiera voy a intentar pronunciar esto!"

1. Ah, el temido primer día de clase. ¿Qué hará el maestro?

2. ¿Quedarse en esa primera sílaba burlonamente, esperando a que tú lo termines?

3. ¿O lo pronunciará incorrectamente?

4. O solo se va a dar por vencido y dirá "Ni siquiera voy a intentarlo! ¡Solo lo voy a arruinarlo!

5. Al menos ya no volverá a pasar el resto del año escolar - por supuesto, hasta que tengas un sustituto:

6. Las personas siempre te preguntan que significa tu nombre.

7. Las personas con apellidos normales siempre están pensando en nombres de bebé horribles y desacertados porque no entienden La Lucha.

8. ¡Quelle horreur! Alguien escribió mal Tabitha. Debe ser muy difícil para tí, TABITHA. Porqué no haces un blog al respecto.

9. Esos regalos personalizados de turista jamas tienen tu nombre.

10. Definitivamente has usado una versión falsa y fácil de tu nombre para hacer reservaciones en un restaurante.

11. Lo bueno es que sabes INMEDIATAMENTE que te está llamando un vendedor por el medio segundo que vacila antes de decir tu nombre.

12. La gente te pone apodos para no tener que decir tu nombre completo.

13. Si es un nombre que suena étnico, la gente siempre te pregunta si hablas el idioma y tienes parientes en ese país, como si la inmigración a los Estados Unidos no estuviera pasando desde hace 300 años.

14. Tu identidad tiene que incluir decirle a la gente como se pronuncia tu nombre.

15. Hay una situación incómoda cuando corrijes a alguien que ha dicho tu nombre mal por algún tiempo.

16. Cuando estas llenando un formulario, a la mitad te das cuenta de tu nombre...

17. De verdad, nunca cabe en NADA.

18. Hasta tus mejores amigos dicen tu nombre mal.

19. Has perfeccionado la forma de decir la pronunciación utilizando palabras mas normales.

20. Por lo menos no tienes que preocuparte que alguien con el mismo nombre en las redes sociales.

21. Como nadie tiene tu nombre, no puedes esconder tus pistas vergonzosas de Google.