Entonces tienes poco más de veinte, terminaste los estudios y de repente te das cuenta de que estás solo.
¿Una solución para esa melancolía de los veinte? Un GATO.
He aquí por qué:
1. Un gato llenará tu apartamento vacío con algo de cariño, suavidad y vida.
2. Los ronroneos de un gato son el tipo de relajación que necesitas luego de largas jornadas de trabajo como principiante.
3. Y tendrás compañía con la cual agazaparte aunque tu vida amorosa parezca bastante desolada.
4. De hecho, los abrazos de gato REALMENTE ayudan con el mal de amores. Más que el helado.
5. En tu estúpida vida atareada, tu gato será una constante.
Quizás no sepas cómo vas a pagar la renta, pero sí sabes que te espera en casa un minino listo para maullar hasta que le des de comer.
6. Los gatos son tan independientes como para adaptarse a tu estilo de vida veinteañero en constante cambio.
7. Y al adoptarlo a los veinte, recibes en casa a un amigo que te verá pasar por tiempos buenos, malos y todos tus matices intermedios.
8. Es una época genial para afianzar tu propia independencia y tener tu primera mascota lejos de tus padres, o tu primera mascota en absoluto.
9. Un gato te mantiene ordenado y te ayuda a quitarte esa irresponsabilidad universitaria.
10. Y el pelo de gato por todas partes te dará ese empujón adicional que necesitas para limpiar y aspirar todo.
11. Son buenos indicadores para saber si estás listo o no para tener hijos.
12. En general, los gatos son excelentes excusas: algo que todo veinteañero SIEMPRE guarda en su manga.
"Oh, ¡CIELOS! Me encantaría ir a tu espectáculo de improvisación, pero me olvidé de darle de comer al gato".
13. Tener un gato significa más contenido atractivo para Instagram.
14. Además, un gato es material inacabable para esos flirteos incómodos de una primera cita.
Y si eso espanta a tu pareja, ¿QUIÉN LA NECESITA?
15. Puedes ponerle al gato algún nombre ridículo que solo consideraría un veinteañero.
16. Cuando tus metas profesionales te decepcionen, siempre tendrás el logro de haber salvado a un minino.
17. Y durante esta época tumultuosa de tu vida, tiene sentido tener a alguien a quien amar todos los días.
