1. Cuando lo único que querías era secarte las manos.
2. Cuando te das cuenta de que, a pesar de tus grandes esfuerzos, terminas mojando tu manga al lavarte las manos.
3. Cuando solo quieres un poco de pan con mantequilla, pero la mantequilla no coopera contigo.
4. Cuando tu cuchara termina dentro de sopa.
5. Cuando tienes que despegar el extremo de la cinta adhesiva con las uñas.
6. Cuando vas al baño en calcetines y pisas un charco.
7. Cuando te das cuenta de que alguna persona detestable puso una cuchara húmeda en el azúcar.
8. Cuando vas en el transporte público y alguien se sienta justo a tu lado a pesar de haber muchos otros asientos vacíos.
9. Cuando la pasta dental se cae de tu cepillo de dientes.
10. Cuando olvidas sacar ese pañuelo desechable de tu bolsillo antes de echar los pantalones a la lavadora.
11. Cuando te despiertas por la mañana con la batería de tu teléfono descargada e inmediatamente supones que tu teléfono o tu cargador no funcionan.
12. Cuando alguien entra en la habitación y no se toma la molestia de cerrar la puerta al salir.
13. Cuando alguien se para tan cerca de ti que tienes que alejarte, solo para que esa persona se te acerque otra vez.
14. Cuando partes un aguacate solo para descubrir el peor de los engaños.
15. Cuando piensas que finalmente has encontrado un lugar para estacionarte.
16. Cuando sacas la basura y la bolsa deja un asqueroso rastro por todo el lugar.
17. Y, por supuesto, los AURICULARES.
Este post fue traducido del inglés.