No cabe duda alguna de que las vibrantes influencias indígenas, africanas, y europeas que componen a la gastronomía colombiana son lo que lan ha convertido en una de las más apetecidas a nivel global. Y ni hablar de cómo platos de otros países latinoamericanos hoy se unen al menú colombiano.
Es que es casi imposible ignorar una gama de colores exuberantes, texturas hipnotizantes, y sabores maravillosos producidos por ingredientes tradicionales de Latinoamérica, y servidos por las manos amorosas de mamás colombianas.