1. Primero que nada, las alergias "por temporada" no existen.
2. En días malos, tu nariz se verá roja y raspada de tanto sonártela.
3. En días muy malos ni siquiera puedes salir de casa.
4. Le temes a los días con mucho viento.
5. Y a la lavanda (o en realidad a cualquier fragancia ultra fragante).
6. Vives por los días lluviosos porque entonces puedes salir.
7. Cuando la gente te dice que se sienten afortunados por no tener alergias.
8. Cuando olvidas tomarte tu pastilla de la alergia.
9. Cuando tomas tu pastilla de la alergia muy tarde en el día.
10. Cuando has deambulado somnolientamente por días porque lo único que funciona es el Benadryl.
11. Dolores de cabeza sinusales.
12. Que se convierten en infecciones sinusales.
13. Por mucho que de verdad te guste estar en exteriores, físicamente no puedes.
14. Y, en general, las alergias no te dejan disfrutar de las cosas.
15. Como perros.
16. Y gatos.
17. Y, tal vez más que ninguna otra cosa, sueñas con aplicarte inyecciones para alergias para darle un fin a todo.
