1. Quita los colores oscuros con Vaselina.
2. Repara un labial roto con un encendedor.
3. Usa un delineador transparente o translúcido para evitar que los colores rojos y oscuros sangren.
4. Considera usar un primer para labios para rellenar líneas y hacer que tu color dure más.
5. Una forma fácil de evitar que el labial te manche los dientes es pasarte un dedo por los labios.
6. Cura los labios secos y paspados exfoliándolos con bálsamo de labios en un cepillo de dientes.
7. La X marca el tesoro: Este secreto de delineado hará más fácil saber dónde dibujar y sombrear.
8. Para que el color dure más: luego de aplicar el color, espolvorea un poco de polvo translúcido sobre un pañuelo.
9. Un consejo preventivo y que aumenta los labios: Usa un cepillo para aplicar corrector a los bordes de tus labios.
10. ¿Se te acabó el labial o no tienes el color que deseas? Rompe un poco de sombra de ojos con Vaselina o Aquaphor para crear un brillo con color.
11. Los bebedores de vino saben que las marcas rojas pueden arruinar el color de tus labios. Si has estado bebiendo y necesitas un retoque, pasa uno de estos pañuelitos sobre tus labios antes de reaplicar tu color.
12. Si quieres labios más gruesos, puedes probar un brillo volumizador, ¡sentirás un hormigueo en tus labios!
13. Para abultar tus labios de forma casera, prueba un poco de aceite de menta.
14. Si quieres usar delineador para conseguir unos labios más carnosos, todo lo que necesitas es encontrar dónde exagerar la línea.
