1. No te importa depilarte las piernas en invierno porque así estás más tiempo bajo el agua caliente.
2. Siempre te abrigas, como mínimo, con una capa más que los demás.
3. Optas por los culottes en lugar del tanga porque te abrigan más el trasero.
4. Cuando todo el mundo dice que la nieve es mágica y bonita, tú no dices más que "No".
5. Otras intentan ir lindas con poca ropa cuando hace frío. Tu estrategia es algo distinta.
6. Tú cuando te intentan sacar de la cama:
7. Tus compañeros de trabajo o clase te conocen como "la chica que siempre está helada, aunque haga 25 grados fuera".
8. Piensas que las Uggs (o las falsas Uggs) son feas como el diablo, pero te las pones porque son como caminar por una nube cómoda.
9. Nunca entenderás por qué los espacios cerrados tienen tanto aire acondicionado.
10. La botella de agua caliente que sueles guardar para los retortijones se ha convertido en tu accesorio omnipresente.
11. Poco te importa el pelo desarreglado porque lo importante es que TENGAS CALORCITO.
12. Luego, claro, hay... un problema.
13. Si alguien te hace esto y se cree gracioso, LO DESTRUYES.
14. Estás en guerra permanente con tu familia/compañeros de piso por el termostato.
15. Has aceptado la piel de gallina como tipo de piel por defecto.
16. Ni por asomo te dan calor las mallas.
17. Tienes un "idioma invernal" especial.
18. Las manoplas hacen un montón de ejercicio porque las usas tooooodo el día.
19. Ninguna sudadera de nadie está a salvo cerca de ti.
20. El gorro no te pega con la bufanda, ni con los guantes, ni con el abrigo.
21. Sinceramente, esto parece medio interesante.
22. Calcetines hasta la rodilla. Siempre.
23. Has intentado enfundarte en la bufanda de cuello.
24. Las medias no quedan bien debajo de los pantalones, pero te las pones de todos modos.
25. No le das a nadie la mano al descubierto.
26. Sujetas un té o un café para, en cierto modo, tener los dedos calentitos.
27. Ojalá pudieras pasar los cuatro próximos meses bajo una gruesa capa de mantas.
