Hola, amigos, bienvenidos a este hermoso artículo sobre la serie televisiva, The Walking Dead.
Como probablemente sabrás, The Walking Dead se estrenó en 2010 y trata sobre el mundo después del Apocalipsis zombie.
La amaba, religiosamente la veía semana con semana. Escribía sobre ella aquí. Amaba a los personajes. Estaba loco por los zombies. Yo era este GIF de Rick Grimes cada que se estrenaba un nuevo episodio:
De pronto... algo pasó. El encanto se rompió y mis noches de zombies dejaron de ser como antes.
Pero entonces... entró una duda a mi cabeza, ¿el problema soy yo o es The Walking Dead?
¡EL PROBLEMA ERA THE WALKING DEAD!
Para empezar, se volvió ultra monótona.
La serie se hizo tan reptitiva que hasta los ciclos de mi lavadora son menos predecibles.
Los walkers... dejaron de dar miedo.
Y la trama... pues como que dejó de tener sentido.
Negan esto, Negan aquello, Negan lo otro, Negan, Negan, Negan.
Como diría Niurka...
Hablando de los personajes, ¿cómo esperan que tengamos la energía para preocuparnos por tantos?
Ah, pero lo que sí están chidos los tienen arrumbados en el olvido.
A veces, hasta parece que a los que la hacen les da flojera.
Hablando de los creadores, tienen pensado seguir hasta la temporada doce.
