Millie Bobby Brown se sinceró recientemente en una nueva entrevista sobre el modo en que las redes sociales la han tratado desde que se convirtió en una estrella infantil.
Por supuesto, Millie solo tenía 12 años cuando Stranger Things se estrenó en Netflix. Crecer en el ojo público no ha sido fácil: ha recibido mensajes inapropiados de hombres adultos y ha sido objeto de acoso. De hecho, Millie ya no tiene redes sociales en su teléfono, y otra persona gestiona su Instagram y Facebook.
Millie, que ahora tiene 18 años, ha acudido desde entonces a terapia para lidiar con el trato que se le ha dado en Internet. "Es muy difícil que te odien cuando aún no sabes quién eres", dijo Allure.
"Así que me pregunto: '¿Qué es lo que odian de mí? Porque no sé quién soy'".
A su vez, Millie intentaba ser diferentes versiones de sí misma. Sin embargo, la respuesta era negativa hiciera lo que hiciera: "¡Dios mío! Odio cuando haces eso".
"Entonces empiezas a cerrarte porque te dices: '¿Quién se supone que debo ser? ¿Quién necesitan que sea para ellos?'".
"Luego empecé a crecer más, y mi familia y mis amigos me ayudaron mucho. Me ayudó a entender que no necesito ser nada de lo que me dijeron que tenía que ser. Solo tengo que desarrollarme en mi interior. Eso es lo que hice".
No es la primera vez que Millie denuncia la forma en que las redes sociales la tratan: cuando cumplió 18 años en febrero, comentó en el podcast Guilty Feminist: "Definitivamente, veo una diferencia entre la forma de actuar de la gente y la forma en que la prensa y las redes sociales han reaccionado a mi llegada a la mayoría de edad... es una muy buena representación de lo que está pasando en el mundo y cómo las chicas jóvenes son sexualizadas".
Puedes leer el artículo completo de la portada de septiembre sobre Millie en Allure aquí.
Este post fue traducido del inglés.