El presunto feminicida de Ecatepec tiene protección oficial en el penal y las familias de las posibles víctimas sospechan que tiene otros cómplices

    Juan Carlos y Patricia "N" fueron vinculados a proceso por los delitos de feminicidio y trata de personas.

    Cerca de las 9:00 de la mañana, el frío no cesa. María Esther Ochoterena, madre de una de las posibles víctimas de Juan Carlos "N", viste una chamarra azul y una bufanda amplia. Ella quisiera haber traído una cobija; lo comenta con otras tres mujeres que permanecen muy juntas para no dejar pasar el aire gélido.

    Antes de que amanezca, el penal de Chiconautla huele a basura y el aire helado hace temblar las manos. Este lugar se ubica en el municipio de Ecatepec, Estado de México, su nombre oficial es Centro de Readaptación Social "Dr. Sergio García Ramírez" y hoy es el lugar donde viven Juan Carlos y Patricia "N", la pareja capturada el pasado 4 de octubre en la colonia Jardines de Morelos mientras transportaban restos humanos en una carriola.

    Tras detenerlos, las autoridades catearon dos casas en Ecatepec y encontraron más restos humanos. El pasado 6 de octubre, tras su ingreso a prisión, un juez decidió vincularlos a proceso por los delitos "contra el respeto a los muertos y violaciones a las leyes de inhumación y exhumación", según la fiscalía local.

    El penal donde permanecen internados es mixto: tiene una capacidad para albergar a mil 200 hombres y a 100 mujeres. Sin embargo, la Comisión Nacional de Derechos Humanos denunció en 2017 que la población carcelaria rebasa el límite, pues hay 4 mil 212 hombres y 220 mujeres.

    El exterior del lugar está rodeado de perros flacos que buscan un poco de alimento entre los puestos callejeros. Los comerciantes venden envases y bolsas de plástico transparentes para cumplir con el reglamento de la prisión, el cual prohíbe el ingreso de todo tipo de empaques oscuros.

    Ahí, entre los puestos, las mujeres que acuden a visitar a sus familiares se amontonan para comprar una bolsa y poder poner en ella cobijas, papel de baño, sandalias, comida. Pero no todos los alimentos están permitidos, las reglas no permiten cosas como jugos de frutas, atole, té, refrescos de cola, bebidas alcohólicas, pizza, mariscos y cosas capeadas.

    También están permitidos ciertos libros de contenido académico. Se prohíben las publicaciones de nota roja y que contengan material violento o pornográfico. Asimismo, el reglamento advierte que no se pueden ingresar libros de "literatura obscena".

    Un portavoz de la Secretaría de Seguridad del Estado de México dijo a BuzzFeed News México que Patricia y Juan Carlos están separados dentro del penal de Chiconautla y que ambos cuentan con protección especial al interior para que otros presos no puedan hacerles daño. En junio de 2017, el presunto feminicida de Valeria, una niña de 11 años, murió mientras estaba en prisión; la versión oficial fue que se suicidó y los reportes periodísticos apuntan a que fue asesinado por reos.

    Además de la sobrepoblación, la investigación de la CNDH encontró que en esta cárcel se realizan actividades ilícitas como extorsiones y sobornos, que no hay suficiente personal de seguridad y que los presos han tomado en sus manos la gobernabilidad del lugar. Los servicios de salud son deficientes y –además de la mala alimentación– las condiciones de higiene en la cocina son malas.

    María Esther acudió a las audiencias celebradas esta mañana en el Juzgado de Control, Juicio Oral y Ejecución de Sentencias del Distrito Judicial de Ecatepec, a un costado del penal de Chiconautla, donde Juan Carlos y Patricia "N" fueron vinculados a proceso por los delitos de trata de personas y feminicidio.

    Un agente de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México presentó ante un juez evidencias que vinculan a la pareja con el asesinato de una mujer de 28 años que se reportó como desaparecida junto con su hija en la colonia Jardines de Morelos, en Ecatepec, a inicios del mes de septiembre. La niña tenía dos años de edad y habría sido vendida por Juan Carlos y Patricia tras matar a su madre, según la acusación de los fiscales.

    Araceli González, madre de otra de sus posibles víctimas, dijo a BuzzFeed News México que durante la audiencia notó a los presuntos culpables con un comportamiento extraño. "Igual que siempre, una actitud fría y yo hasta diría burlona. La señora hasta se ríe de mí".

    La defensa de las otras posibles víctimas no está conforme. Una abogada de la Red de Madres Buscando a sus hijos comentó a BuzzFeed News México que no cree en la versión oficial del caso. "Pensamos que esta persona está ocultando a más cómplices. Necesitamos saber si hay otros", dijo la abogada Leticia Mora, quien busca reunirse con la fiscalía estatal para tratar este tema.

    Hasta el momento van tres procesos penales abiertos en contra de Juan Carlos y Patricia. Se espera que las siguientes audiencias sean llevadas a cabo en los primeros días de noviembre.