A estas alturas seguramente ya has escuchado mucho sobre Pokémon GO.
Así que decidimos organizar una cacería masiva Pokémon.
Para nuestro primer Safari Pokémon decidimos invitar a Bully como nuestro padrino de honor.
¡Aquí nuestro equipo inicial!
¿Nuestra primera tarea? Ganar el gimnasio que está en la Fuente de Coyotes.
Fue una lucha difícil y algo ruda, pero entre todos logramos tomarlo.
Ahí nuestro padrino puso un cebo (un ítem que hace que los Pokémon vayan a esa Poképarada) y esperamos a que llegara un ejército de Pokémon.
La verdad es que aunque si aparecieron un par de Pokémon, no era nada que no se hubiera visto antes.
Algunos afortunados lograron atrapar algo.
De pronto nuevas personas se agregaron a nuestra congregación.
La gente empezó a platicar y a convivir. EMPEZARON A HACER POKÉAMIGOS.
Y hasta comparaciones de los Pokémon raros y cómo los habían conseguido.
Después de nuestro bonito momento de unión, decidimos que la mejor estrategia era seguir nuestra búsqueda a pie.
Nos adentramos al jardín de la Iglesia que está en el centro de Coyoacán, porque era una Poképarada y además, había Pokémon adentro.
¿Siguiente objetivo? El Callejón del Aguacate.
Encontramos una virgen que (supuestamente) llora a la media noche y cabezas atravesadas...
Después de mucho buscar, no encontramos ningún Pokémon fantasma (aunque sí un Onix).
Decidimos regresar al centro para terminar nuestra Pokéaventura del día y cerrar el recorrido con un helado.