La breve y completa historia de "Ingue Su Matrushka”, los mexicanos que conquistaron Rusia en camión

    Desde Durango hasta Moscú, con permiso y sin permiso de sus novias, los mexicanos viajan por todo Rusia, "quiero que vivan la misma aventura".

    ¿Por qué en avión si se puede en camión? Ahí es cuando aplicas la de ya tienes el no y vas por el sí. Y así lo pensaron Daniel Garza, Roberto, Mathew, Daniel Galindo, Fernando, Julio y varios amigos más que han ido cambiando de rumbo en este largo peregrinar del sueño de Rusia 2018 a bordo de “La Bendición”. El famoso camión colorido que ha recorrido todo un sueño para llegar a Rusia con un grupo de mexicanos, un chileno y un canadiense a bordo.

    Esto comenzó en el Mundial de Brasil 2014 cuando Daniel, Mathew y Fernando estuvieron platicando con otros chavos de Apodaca, Nuevo León, en las sedes donde México jugaba en aquella Copa del Mundo. “Ellos traían una camioneta. Viajaron entre 6 y 12 meses. Una noche echamos “cheves” con ellos en Fortaleza y Recife (Brasil). Nos cayeron bien y nos contaron experiencias increíbles. Nos sorprendió mucho cuando vimos las placas. ¡Qué onda con estos locos!”, dijo en aquél momento Daniel Garza de 32 años, originario de Durango, Durango. Esto por supuesto les llamó la atención y luego de platicar de esto por mucho tiempo, se empezaron a formular las ideas para trazar el rumbo para Rusia 2018.

    Empezaron a ahorrar. “¿Cómo le vamos a hacer y cómo hacemos algo parecido? Porque de entrada nos gusta viajar a todos. Pensamos en hacer un food truck pero los permisos resultaban muy complicados”, asegura Daniel por lo que tomaron la decisión de ahorrar durante mucho tiempo.

    En este momento del viaje los integrantes han ido cambiando. Inicialmente eran seis amigos pero han cambiado como nueve personas. Los originales se regresaron poco a poco por cuestiones de trabajo y hasta el final solo quedaron Daniel Garza de Durango, Mathew de Canadá y Daniel Galindo.

    “Julio (el chileno) también es original pero lo encontramos en internet. Al principio decíamos en redes que no podíamos manejar y en un post que pusimos en redes sociales, pidiendo a alguien que manejara en las carreteras, él resultó la mejor opción. Maneja muy bien, le da a la mecánica, es bueno para la fiesta y muy aliviando. No nos hubiera aguantado un señor más grande ya que habían otras opciones de 60 o 70 años y no nos hubieran aguantado con la música a todo volumen”, comenta Daniel Garza quien lucía cansado luego de tres entrevistas el mismos día.

    “La Bendición” es una revelación en Rusia.

    Más allá de los sombreros de charro, la televisión, las camas desechas, maletas debajo de las literas, gorras, botellas de refresco y más cosas que puedes encontrar a bordo del camión, hay un acompañante muy especial. Él es Javier, el famoso amigo que imprimieron en grande ya que no pudo venir porque la novia no lo dejó ir.

    Aunque nunca les dio una explicación como tal a sus amigos, han podido hablar con él y claro que está arrepentido por la gran experiencia que han vivido pero le da mucho gusto saber lo que ha ocurrido con el viaje. “No pensamos que se fuera a viralizar tanto lo de su imagen impresa. Hasta le han inventado que no pudo venir por su mamá, ya que surgió un mal entendido en una entrevista en España que nos hicieron. Confundieron “vieja” con mamá y de ahí surgió esa desinformación”, nos cuentan Daniel Garza y Roberto.

    Cualquiera pensaría que viajar al Mundial implica entrar al menos a algún partido de futbol. Pues los integrantes de “La Bendición” han viajado sin boletos para ver a México y amparados a la suerte de poder conseguir una entrada con el mejor postor.

    “Contra Alemania tuvimos suerte y sí conseguimos. Pusimos un post en nuestras redes sociales donde pedíamos que nos ayudaran con boletos a un precio razonable, ya que nuestro presupuesto es muy corto, y nos contactaron varias personas. Por suerte conseguimos un gran precio para el juego contra Alemania. Esperamos tener la misma suerte contra Corea y contra Suecia”.

    “De los que quedamos ahorita casi todos tenemos novias. Mathew y yo tenemos novia, Robert está casado y solo Julio está solo. No subimos gente al camión más que para fotos, el objetivo es viajar. No podemos subir mucha gente porque traemos un permiso que sí es muy estricto y solo permite a 9 personas a bordo”, nos cuentan Daniel y Mathew.

    De Durango se fueron a Altamira, Tamaulipas, para que “La Bendición” viajara en un barco hasta un puerto en Valencia y recorrer todo Europa hasta Rusia. Muchos kilómetros y muchas experiencias. Muchos días.

    Pero, ¿Existirían las ganas de repetirlo? “¡Claro, jaja! Lo queremos repetir con doble piso. Si ahorramos bien, seguro que sí. La verdad creo que negativo casi no ha ocurrido nada o muy poco. Las distancias, que son muy largas en Rusia, la aduana donde tuvimos algunos detalles pero fue en Alemania principalmente. De ahí en fuera ha sido una experiencia maravillosa”, platica Daniel Garza a BuzzFeed News México con una gran sonrisa de satisfacción.

    “La Bendición” tiene un permiso de importación temporal. Dejarlo era más complicado y por ello lo tienen que regresar a México. Mientras el camión cruzaba el océano Atlántico, ellos volaron en avión a Valencia y esperar la llegada de "La Bendición".

    “Tenemos seis meses para estar aquí. Pensamos estar hasta agosto a más tardar. No sabemos si nos quedamos en Rusia o a si vamos a recorrer Europa. Somos libres. Solo sabemos que seguimos al Tri y de ahí depende después”, asegura Daniel sobre el futuro de “La Bendición”.

    Es una historia que todos quisiéramos tener o al menos que a todos nos gustaría experimentar. Rodar un camión al estilo mexicano. Con adaptación de casa rodante. Con amigos. Con un claxon de “La Cucaracha”. Con libertad. Algo que todos quisiéramos contar.

    “Pues yo no le voy a contar esto a mis hijos, los voy a llevar al próximo. Tengo dos sobrinos y estoy esperando que tengan la edad para viajar y los quiero llevar de viaje conmigo. No quiero que lo vean en una película o en un documental, quiero que vivan la misma aventura y compartir esta manera de vivir”, asegura con un perfecto español Mathew, quien es de Montreal, Canadá.