Por si no lo sabías, este mes Netflix estrenó la primera temporada de una serie de terror llamada Marianne.
La verdad, en su momento la dejé pasar porque no me llamó la atención, pero en su fin de semana de estreno vi varios tweets hablando de los terrorífica que estaba.
Yo viendo Marianne #Marianne 😁😆
Nivel, me prometieron que me iba a cagar de miedo.
Terror puro. Vayan a verla, se van a cagar de miedo. #Marianne
Así que me dije a mí mismo: "Mí mismo, tenemos que verla para escribir sobre ella".
La serie de ocho episodios sucede en Francia, principalmente en el pueblo ficticio de Elden.
Cuenta la historia de Emma Larsimon, una autora bestseller de una serie de libros de terror.
Los libros siguen a una mujer llamada Lizzie Larck y sus múltiples encuentros con una bruja súper 666 maligna llamada Marianne.
La serie empieza justamente cuando Emma presenta el libro final en la saga de Lizzie, al mismo tiempo que recibe una visita inesperada* de una de sus amigas de la infancia.
Emma se da cuenta que algunos elementos de sus historias se están volviendo realidad y decide volver a su pueblo natal para ver qué onda.
Como el hecho de que combina varios tipos de terror para lograr su fórmula tan macabra.
También hay que decirlo, cae en la mayoría de los clichés de una película de terror, pero lo hace tan bien que genuinamente sí te saca unos buenos sustos.
Pero también tiene momentos terroríficos originales que sí te provocarán pesadillas. Más allá de los sustos, Marianne tiene imágenes muy perturbadoras que seguro te visitarán de noche.
Además del terror, la serie es particularmente sangrienta.
Al más puro estilo de Stephen King, la historia de Marianne está envuelta en una trama mucho más compleja.
Todo el viaje personal de Emma le da un toque muy emotivo a la serie que la diferencia de la mayor parte de las cintas de terror que sólo te quieren sacar un susto.
La serie tiene su propia y compleja mitología que todos los clavados del horror amarán.
Sin mencionar que la forma en la que está contada te atrapa por completo.
Y aunque la mayoría de las historias de terror tiene secuelas un poco forzadas, Marianne deja el camino pavimentado para una muy terrorífica segunda temporada.
Así que si tienes ganas de ver una serie de terror que te dará pesadillas, buenos sustos y te mantendrá intrigado, Marianne es para ti.
