
1. Deshazte del olor a cabello quemado con un secado en frío.
2. Secciona tu cabello así para un planchado extra rápido.

3. Controla los cabellitos rebeldes con un cepillo de dientes.

4. Alivia los mechones quemados con aceite de olivo y miel.
5. Invierte en unos guantes resistentes al calor.

6. Dale un respiro obligado a tu cuero cabelludo y vaporízalo.
7. Sácale provecho a tu planchado con un shampoo en seco.
8. Cambia de look y riza tu cabello con la misma plancha.

9. Ten a la mano una plancha de turmalina.

10. Reemplaza tu cepillo por un peine de cerdas gruesas.
