1. Es hora de dormir pero…

2. Y por más que intentes conciliar el sueño irremediablemente pasa esto.
3. Es hora de despertar.
4. Tu calendario de alarmas se ve más o menos así.

5. Cuando por fin te levantas de la cama.
6. Éste eres tú al momento de arreglarte.
7. Te sabes todos los atajos, caminos rápidos y trucos para evitar el tráfico.
8. Pero siempre pasa esto.
9. ... O esto.

10. Cuando por fin llegas a la escuela/oficina.
11. Tu jefe/maestro.
12. Hay días en los que logras despertarte temprano.
13. Y crees que tienes todo el tiempo del mundo.
14. Pero no contaste con que el tiempo en la mañana, por alguna extraña razón, transcurre MUCHO más rápido.
15. Y terminas llegando… tarde.
16. Generalmente eres el último que se entera de las noticias relevantes del día.
17. El día, extrañamente dura muy poco.
18. Y consideras volverte un vampiro.
19. Ya probaste con adelantar el reloj, para ver si poniéndote un susto cada que volteas a verlo funciona.
20. Y el pavor absoluto es tener un vuelo a las 7 de la mañana.
21. Eso, sin contar el constante riesgo de que te corran (o te reprueben… o te corten).
22. Por eso, te volviste un experto para los pretextos.
"Lo que pasó es que me encontré a un gatito que se parecía al dragón de Cómo entrenar a tu dragón y me pidió ayuda para regresar a casa. ¿Usted lo habría dejado solo y desamparado, jefe?"
23. Tanto, que ya nadie te cree cuando realmente te pasó algo.
24. La culpa a veces te corroe.
25. Y el frenesí de emociones que van del miedo, a la negación, al enojo a la autoflagelación es algo que experimentas diario.
26. Te convences de que a partir de ahora vas a dormirte más temprano, pero…
27. Cuando es hora de dormir, IRREMEDIABLEMENTE pasa esto.
