Como era de esperarse, los juguetes ya están aquí.
Y tuvimos la oportunidad de jugar (brevemente) con un BB8. Esto fue lo que pasó.
La emoción al abrirlo es similar a cuando llegaban los reyes magos.
La caja es hermosa, todos los detalles están cuidados.
Lo descubres y ahí está, en todo su esplendor. El juguete que los fans de Star Wars necesitábamos en el siglo XXI.
Para usarlo, se necesita cargar encima de su base y es necesario bajar una aplicación.
BB8 es pequeño, te dan ganas de hablarle como si fuera un niño chiquito.
Al descargarse la aplicación (minutos de larga y extensa agonía) comienza la magia.
¡Suena el tema de Star Wars cuando la abres! No puedes creer la mezcla entre felicidad, emoción, nervios.
Hay que acercar el teléfono y de pronto… ESTÁ VIVO… y de alguna forma presientes que tiene un alto nivel de midiclorianos.
El androide es carismático, y por lo mismo es difícil controlarlo al principio.
Funciona de la misma forma en la que lo viste en el tráiler del Episodio VII.
Tratas de mantener el control, pero de pronto se va corriendo.
Tiene un modo de ~patrullero~, en donde solito va reconociendo el entorno.
BB8 tiene la capacidad de grabar mensajes con la cámara de tu celular y reproducirlos (en tu celular).
Es el mejor amigo/enemigo de los gatos.
Es tu mejor acompañante en todo momento.
Es excelente para ligar.
Horas y horas de sano esparcimiento nerd.
Cantarás la canción de Star Wars noche y día.
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Se va volviendo parte de tu vida.
El juguetito, diseñado para los adultos que no pudimos tener todas estas maravillas en nuestra infancia cuesta $150 USD. Aún no hay noticias de cuándo llegue a México.
