99 Cosas buena onda que puedes hacer para mejorar tu vida y la de los que te rodean

    No te quitarán nada y te darán mucho.

    Saluda y platica con la gente que te da servicio. No importa si es el poli de la entrada del metro o la señora de limpieza de la oficina.

    Preséntate con tus vecinos y ofréceles tu ayuda en caso de que la necesiten.

    Mándale un mensaje de agradecimiento a tu mamá.

    Dile “te quiero” a tu papá.

    Hazle un cumplido a alguien que no conozcas.

    Adopta una mascota. Si no puedes, date una tarde para sacar a pasear a perritos en albergues.

    Págale el café a la persona que vaya después de ti.

    O deja uno pagado para alguien con necesidad.

    Mantén abierta la puerta para la persona que venga detrás de ti.

    Deja pasar al coche que quiere entrar a tu carril.

    Deja que tu pareja escoja qué ver en la tele.

    Ayuda a alguien que esté mudándose.

    Mándales cartas por correo a tus amigos.

    O envíales una postal en tu próximo viaje.

    Sé voluntario en algún proyecto que llame tu atención.

    Limpia tu clóset y dona la ropa que ya no uses.

    Si algún amigo tuyo está lastimado, ve al súper y llévaselo a su casa.

    Escríbele a ese amigo con el que no hablas hace años.

    Busca una cualidad en esa persona que te caga.

    No molestes (no importa cuántas ganas tengas de hacerlo).

    Un día de la semana llévale algo rico a tus compañero de trabajo. Pueden ser donas, cafés, papitas, lo que tú quieras.

    Si te gusta tu trabajo, díselo a tu jefe. Y agradécele si has aprendido algo de él.

    Si va a ser cumpleaños de alguien, hornéale un pastel.

    Dale tu lugar en el transporte público a alguien que lo necesite.

    Llega a tiempo a tus citas. No hagas que los demás te tengan que esperar.

    Llena el tanque de gasolina de tu pareja, o del coche de tus papás.

    Da una muy buena propina sin arrepentimientos.

    Si vas a tirar algo a la basura, checa primero si puedes donarlo o regalárselo a alguien.

    Y tira la basura en su lugar.

    Paga la cuenta.

    Dale los buenos días a las personas que su suban contigo al elevador.

    Hazle los mandados (literalmente) a una persona mayor.

    Págale la entrada a la persona detrás de ti en el transporte público.

    Compra comida extra y dásela a alguien de tu colonia que no tenga qué comer.

    Pon tu carrito del super en donde debe ir.

    Si te topas con un conductor violento, déjalo pasar sin enojarte de regreso.

    ¿Tienes un profesor que marcó tu vida? Escríbele para recordárselo.

    Perdona una deuda.

    Pide perdón sin dar excusas.

    Sé amable con los telemarketers.

    Llévale flores a tu mamá la próxima vez que la veas.

    Si pasas por un parquímetro que ya expiró, ponle dinero.

    No interrumpas.

    Si conoces a alguien que acaba de mudarse a tu ciudad, ¡sácalo a pasear!

    ¿Estás en una comida familiar o de amigos? ¡Guarda tu celular!

    Cada vez que compres una prenda de ropa, dona una que no uses.

    No desperdicies la comida. En lugar de dejar que la tiren en el restaurante, pídela para llevar y dásela a una persona en situación de calle.

    Sonríele a alguien random en la calle. Solo porque puedes, y quieres.

    Perdona a alguien y realmente olvida.

    Hazle un lista de canciones a tu mejor amiga.

    Abraza a alguien que sepas que lo necesite.

    Si usas lentes y tienes que cambiarlos, regálalos para que alguien más pueda usarlos.

    Recicla tus pilas y productos electrónicos. Contaminan muchísimo cuando llegan a la basura.

    Cuando escuches, hazlo de verdad. Pon toda tu atención en esa conversación.

    Ofrécete para cuidar el bebé de alguien cercano a ti para que los papás puedan tener un día libre.

    Recuérdate, constantemente, que cada quien está peleando sus propias batallas. Dales chance.

    Escribe una lista para tu pareja donde escribas todas sus cualidades, y dásela.

    Habla con esa persona de la oficina con la que nunca hablas.

    Escríbele a tu hermanx para recordarle cuánto lx amas.

    Prepara dos sándwiches y regala uno.

    Hoy no uses tu coche. Haz ronda, vete caminando o usa el transporte público.

    Dile que sí a la cajera que te pregunta si quieres donar dinero a una causa.

    Dale el beneficio de la duda a esa persona.

    Lava los platos. Aunque no te toque.

    Ofrece un chicle. Sí, seguro todos van a querer, luego compras más.

    Todos los días. Antes de dormir, piensa en por lo menos una cosa por la que estás agradecido.

    Arma el plan con la persona a la que llevas dándole largas durante meses.

    Dona tu tiempo en un hospital para niños o un asilo.

    En el Día de las Madres y en el Día del Padre, márcale a alguien que haya perdido a sus padres.

    Imprime y enmarca una foto que te guste mucho de alguien que quieras y regálasela.

    Piensa en alguien que haya marcado tu vida y hazle saber cuánto se lo agradeces.

    Si alguien está chismeando sobre otra persona, atrévete a dar el comentario positivo sobre la persona.

    Si eres bueno en algo, conviértete en maestro amateur y enséñale a alguien más.

    Deja pasar al peatón.

    Dona tus órganos.

    Si ves que alguien está perdido, ofrécete a ayudarlo.

    Planta un árbol.

    Alégrate con las buenas noticias de otra persona.

    Cuando vayas a casa de una persona por primera vez, chulea su decoración.

    Ten paciencia cuando te encuentres un niño ruidoso en un avión.

    Cómprate un billete de lotería y cómprale otro a alguien más.

    Deja un buen libro en un lugar público para que alguien más lo lea.

    No compres botellas de agua. Usa una que puedas reutilizar.

    Desconecta tus aparatos electrónicos cuando no los uses. Ahorras energía y ayudas al medio ambiente.

    Compra local. ¿Por qué ir al super cuando puedes comprar tu fruta en la tienda de la esquina?

    Quéjate menos.

    Dile “te amo” a una persona a la que ames.

    Si ves a una mamá que necesita ayuda con la carreola, ¡échale la mano!

    Si alguien te dio un servicio excelente, o hizo algo por ti, díselo a su jefe.

    Sonríe más.

    Si puedes, dona sangre.

    Toma todas las cobijas que tienes arrumbadas en tu clóset y déjalas en un albergue.

    Tira basura que te encuentres en tu camino.

    Comparte tu paraguas en un día de lluvia.

    Defiende a alguien que lo necesite.

    Pídele perdón directamente a una persona a la que sepas que lastimaste.

    Apréndete los nombres de las personas a las que ves todos los días.

    Sé tolerante.

    Cumple lo que prometes.