22 Situaciones que solo entenderás si eres de los que aman McDonald's

    Lo asqueroso no le quita lo sabroso.

    1. No hay nada como despertarte temprano y descubrir que todavía te da tiempo de alcanzar los desayunos.

    2. El problema es cuando llegas y no sabes decidir entre el McMuffin a la mexicana o los hot cakes con salchicha...

    3. Así que decides pedirlo todo, nomás por no dejar.

    4. Eso sí, tener antojo de hamburguesa y que todavía no sea mediodía es una verdadera tortura.

    5. No entiendes a la gente que dice que las hamburguesas de McDonald's no son buenas.

    6. Aunque no se vean como en la foto, te da exactamente lo mismo.

    7. La leyenda habla sobre un genio, una persona fuera de su época que decidió juntar las papas con el helado.

    8. No hay nada como dippear estas delicias en su salsita agridulce.

    9. Pero nunca has entendido por qué son taaan codos con las salsitas.

    10. Cuando ves esa M gigante en el camino, tu apetito se abre instantáneamente.

    11. Ese toque "mexicano" que hace toda la diferencia.

    12. El día en el que descubriste que podías personalizar tu menú fue el mejor de tu vida.

    Aros de cebolla o nuggets en lugar de papas... Las posibilidades son infinitas.

    13. ¿También has pedido muchísima comida y pretendido que no era solo para ti?

    14. Es el lugar perfecto para cuando tienes una hueva tremenda.

    15. Pero no hay nada peor que llegar a tu casa y descubrir que les faltó algo.

    16. Hay dos tipos de personas:

    17. El momento más feliz es aquel en el que descubres que hay nuevos sabores de McFlurry.

    Él sabe qué pedo.

    18. ¿Escuchas eso? Son tus papilas gustativas llorando de emoción.

    19. Di la verdad. Tú también has soñado con robarte una papita ajena recién hechecita.

    20. Cuando crees que ya se te acabaron las papas pero todavía quedan unas en la bolsita.

    21. Lo mejor es que sabes, que aunque la economía falle, siempre va a estar ahí para ti.

    22. Y por supuesto...