1.
Cuando te asomas por la ventana y te das cuenta que, de la noche a la mañana, pasaste de primavera a invierno.
2.
Estas son tus manos si no tienes guantes.
3.
Te das cuenta demasiado tarde que saliste mal abrigado.
4.
Cuando sales del metro y de repente el viento se transforma en una ráfaga de frialdad.
5.
Y te da tanto frío que lo sientes directo en los pulmones.
6.
Cuando llegas a la oficina abrigado hasta la nunca y te ven con cara de: "¿De qué Polo saliste?"
7.
Hasta que te abrazan y se arrepienten inmediatamente.
8.
Si tu oficina tiene corrientes de aire, tu día será un glaciar.
9.
Si no, pasarás todo el día con temor de la hora de salida.
12.
"Descripción gráfica de mí mismo, una cuadra antes de llegar a mi casa".
13.
Al llegar, cierras la puerta como si te estuviera persiguiendo un asesino serial.
14.
Y te das cuenta que, aunque estás aislad@ del frío, de todos modos se siente así...
15.
Y haces lo que sea para calentarte.
16.
Hasta que al día siguiente despiertas y te das cuenta que estás a 25 °C.
17.
Pero una parte de ti sabe que el hielo regresará cuando se le de la gana, en forma de un frente frío o un norte.
