Hola, Guanajuato.
Desde las alturas eres hermosa.
Aún en días nublados, tus colores resaltan lo increíble que es vivir en México.
¿Ves?
Pero como todo lo bueno, de noche, eres aún más impresionante.
Despampanante.
Sin importar el filtro con el que se te vea, siempre tienes algo que dar... y no esperas recibir nada.
Tus detalles escondidos, la forma en la que sorprendes.
Ese eterno espíritu de aventura que contagias.
Irradias arte desde el centro.
Música.
Cine.
Letras.
Escultura.
Y siempre tienes experiencias que nos hacen grandes.
Alta gastronomía.
Y delicias callejeras.
Eres la amalgama perfecta entre tradiciones.
El México nuevo y el viejo.
En tus callejones es imposible no encontrar magia.
Y amor.
Eres tan bella por fuera, como por dentro.
Vibrante.
Tienes un lado oscuro, emocionante y crucial.
Y aunque es importante, sabes que puedes bromear con él.
Presumes con orgullo lo que te ha ocurrido.
Y guardas con decoro a quienes inspiraste con tu grandeza.
Sabes recordar a los que conociste desde que nacieron.
Y al mismo tiempo, provees de casa a los que vienen a conocerte desde lejos.
Un mundo de sabores, olores y curiosidades.
Y sí. También sabes agarrar la fiesta más divertida del mundo.
❤️
