El Día Internacional de la Mujer surge como una respuesta política a la incansable lucha de las mujeres en Europa y Estados Unidos por tener derecho al voto a finales del siglo XIX y principios del XX.
En México, fue hasta 1955 que las mujeres pudieron ejercer sus derechos como ciudadanas.
El 8 de marzo es un día para reflexionar, conversar, y poner el dedo en el renglón sobre la desigualdad histórica en la que han vivido (y viven) las mujeres en el mundo.
Pero definitivamente, NO es un día para "darles amor a las mujeres" y consentirlas con regalos.
El Día Internacional de la Mujer es un día para recordar algunos de estos puntos:
(Y de preferencia, hacer algo al respecto.)
1. Las mujeres en los países pertenecientes a la OCDE perciben 16% menos en su salario que los hombres.
2. Y en México, las trabajadoras de las industrias eléctrica, de construcción y servicios ganan hasta 40 por ciento menos que un hombre.
3. De todos los mandatarios del mundo, únicamente el 10% son mujeres.
4. En Latinoamérica, únicamente 10 mujeres han logrado ser jefas de estado.
5. En México, sólo siete mujeres han sido gobernadoras de un estado.
6. En México, entre 2013 y 2014 siete mujeres fueron asesinadas cada día.
7. Casi el 40% de estos casos se encuentra en situación de impunidad.
8. 6 de cada 10 mujeres migrantes se ven afectadas por la trata de personas en su paso por México.
9. En México, aproximadamente cada cinco minutos, una mujer es víctima de violencia sexual.
10. En todo el mundo, 700,000 mujeres fue obligadas a casarse antes de cumplir 18 años.
11. De las 100 personas más ricas del mundo, sólo 9 son mujeres.
Y sí... esta es la cotidianidad de la televisión mexicana.
Por eso, no felicitar a las mujeres "en su día" se queda corto.
Más bien es un día para recordar y celebrar a todas y cada una de las personas que han hecho algo para que el mundo sea un lugar más igualitario...
A las que han sacrificado sus libertades y sus vidas en pro de un mundo mejor.
Y recordar que aún queda mucho trabajo por hacer.
