Esta es una sandía, la misma fruta aburrida que ya conocías.
Todo el mundo sabe cómo comer sandía.
Como pasa con las mejores cosas de la vida, la Sandía Loca no sigue fórmulas.
Su preparación es muy sencilla.
Llénala de otras frutas sólo para pintarle dedo a la madre naturaleza.
Llena los huecos con cada dulce acidito que conozcas y báñalo todo de chamoy.
No olvides incluir los cañones de pepino, rellenos de cacahuates y salsas.
Ponle helado porque la vida es corta, el mundo es injusto y sólo vivimos plenamente a través de nuestros excesos.
"Oye, BuzzFeed, ¿se le puede poner una Paleta Payaso a la Sandía Loca?"
No te equivoques. La Sandía Loca no es un alimento, es una experiencia.
Es un pretexto para el exceso y la decadencia.
Es hermosa y brilla como el oro bajo el aire de verano.
¡Oh humanidad! Nunca dejes de sorprenderme. <3
