A lo largo de 2017, les preguntamos a los miembros de la Comunidad de BuzzFeed sobre sus peores malas experiencias. Desde fracasos sexuales hasta desastres matrimoniales, estas son las experiencias que te harán sentir que tuviste un mejor año.
1. La terrible experiencia de esta novia:
"Tuve diarrea severa durante mi boda. Mi esposo estaba leyendo sus votos matrimoniales y, de repente, me empezó a salir mierda líquida. Mi vestido de novia tenía una cola larga y la mierda la alcanzó. Cuando por fin salí corriendo a cambiarme 20 minutos más tarde, la cola dejó una mancha de mierda por todo el suelo".
2. La conexión con este gran pene:
"Salía con un chico que tenía el pene más enorme que haya visto. En vez de acobardarme, agarré el lubricante e intenté hacerlo entrar. Tengo dispareunia —una afección que hace que el sexo sea muy doloroso— y su verga terminó desgarrando la parte inferior de mi vagina, como si hubiera dado a luz. Tuve que hacerme una episiotomía, que consiste en una sutura desde la vagina hasta el ano".
3. La horrenda experiencia de esta camarera:
"Trabajaba en un restaurante donde poníamos vasos vacíos sobre la mesa. Una mujer en el restaurante no se sentía bien y empezó a vomitar, pero, en vez de correr al baño, empezó a agarrar los vasos de agua vacíos y a vomitar en ellos. Llenó todos los vasos de la mesa e incluso empezó a agarrar los de los demás. Llenó unos cinco vasos con vómito en medio del restaurante y los dejó sobre la mesa para que la camarera los recogiera. ¿La peor parte? Ni siquiera dejó propina".
4. Este desastre de mierda:
"Una de mis amigas decidió probar sexo anal con su novio... pero su padre entró mientras estaban teniendo relaciones sexuales. Su novio lo sacó superrápido, lo que hizo que ella se cagara en su pene, su vientre y su pecho. Al parecer, el olor era tan horrible que él comenzó a vomitar . El pobre papá vio toda la mierda que ocurrió".
5. Esta espantosa primera cita:
"Un colega atractivo me invitó a salir. Fue a recogerme a mi casa y entró para presentarse a mis padres. Mi abuela estaba allí y dijo: “Eric, es un gusto verte. Recién me tomé un café con tu mamá”. Le pregunté a mi abuela de dónde conocía a Eric y me dijo: “Su madre y yo somos primas”. No teníamos ni idea de que éramos parientes, pero nos alegró mucho que estuviera allí para decírnoslo. Nos salvamos totalmente de esta situación y juramos no decirle a nadie en el trabajo lo que pasó".
6. Esta mamada irritante:
"Hace años salí con un hombre del trabajo y le di una mamada. Inesperadamente comenzó a distanciarse de mí, pero más tarde nos tomamos unos tragos. Él me preguntó: “¿Recuerdas qué comiste el domingo en el almuerzo?”. Yo no tenía idea, pero él dijo: “Comiste pollo con anacardos... Soy alérgico a los anacardos”. Al parecer, su verga se hinchó, le dio comezón, se puso roja y se descamó por la mamada que le di. Ups".
8. Esta perforación carnívora:
"Dejé que una chica de la universidad me perforara el cartílago con una pistola que compró por internet. Pensé que sería genial, pero terminé con una infección grave y bacterias carnívoras que se comieron la punta de mi oreja. Definitivamente aprendí una lección importante: ¡Hay que acudir a un profesional para no perder ninguna parte del cuerpo!".
9. Esta pasantía infernal:
"Hice mi pasantía en un programa de entrevistas en la universidad y me enviaron a recoger a un invitado al aeropuerto y me dijeron que lo mantuviera ocupado por unas horas hasta que llegara la hora de grabar. El tipo estuvo súperespeluznante y callado durante el almuerzo y en los bolos. Cuando finalmente llegamos al estudio, la productora corrió hacia mí asustada y me preguntó cómo había salido todo. Le dije que todo estaba bien, pero le pregunté por qué estaba asustada. Ella dijo: “Dios mío, ¿no te lo dijeron? Él está aquí hoy porque se le acusa de haberle disparado a su hija y a su novio en la nuca con una escopeta y su familia quiere que se haga un polígrafo”. Literalmente, me enviaron con un asesino potencial todo el día y no me lo dijeron".
10. Este contratiempo sexual en público:
"Un día mi amigo con derechos y yo decidimos tener sexo durante una caminata al aire libre. A medida que pasábamos de base y las cosas se ponían más calientes, él trató de quitarse los pantalones, pero tropezó y cayó por el borde de un pequeño precipicio. Tuve que llevarlo al hospital. Por suerte, no le pasó nada".
11. Este encuentro fantasmal:
"Mi dormitorio universitario estaba embrujado. Vivía sola y oía golpes en la ventana en medio de la noche, aunque vivía en el quinto piso. Una noche en particular, se fue la luz. Pero, cuando abrí la puerta, vi que las luces del pasillo seguían encendidas. Volví a mi habitación y vi a una mujer sentada en mi cama. Casi no se le veía la cara y tenía la ropa rota y ensangrentada. Grité y, cuando traté de abrir la puerta para salir, no se movió. Tres personas diferentes vinieron a ver qué pasaba y en ese momento las luces se encendieron de nuevo. Me mudé a la semana siguiente. No quiero volver a vivir en edificios donde haya muerto gente".
12. Este gesto romántico que salió mal:
"Mi novio tenía todas las fotos que tomamos en Disneylandia en su laptop. Mientras buscaba una foto para sorprenderlo con una tarjeta personalizada para el Día de San Valentín, encontré fotos de varias mujeres desnudas con las que él chateaba. No hace falta decir que ya no estamos juntos".
13. Esta mezquina lección:
"En mi anterior trabajo de medio tiempo, trabajaba con una chica que se comía la comida que guardábamos en la nevera. Por supuesto, esta chica siempre se comía mi yogur, así que empecé a traer yogures caducados intencionalmente para ella. Nunca se dio cuenta, pero me daba gusto saber que estaba comiendo productos lácteos vencidos".
14. Este caos en el trabajo:
"Hice una pasantía en un acuario de Chicago. Estaba limpiando el espacio que había detrás de varias de las peceras grandes, rompí un tubo grande y pesado, y le hice un agujero enorme al cristal de la pecera. El agua salía a chorros y yo traté de detener el flujo con mis manos, pero no funcionó, y grité para pedir ayuda. Hubo que "evacuar" los peces a otras peceras y la exposición estuvo fuera de servicio por varias semanas. Por suerte, no murieron animales".
15. Esta casa verdaderamente embrujada:
"Viví con mi amiga hace unos años. Un día, me desperté para ir al baño y vi a un chico joven sentado en la bañera, me estaba mirando. Tenía las rodillas encogidas, el pelo oscuro y corte de hongo, y una piel extraña con moretones. Cuando volví a mirar, ya no estaba allí. Yo TEMBLABA. Cuando mi amiga por fin se despertó, le dije: “Creo que vi algo en el baño, pero creo que estaba muy cansada”. Preguntó: “¿Era un niño de pelo oscuro y piel extraña? Yo también lo he visto”. Ahora siempre me da miedo entrar a ese baño".
16. Esta compañera de cuarto pasivo-agresiva:
"Vivía con mi mejor amiga en la universidad y su novio solía quedarse en el cuarto. Siempre encontraba su vello púbico en el lavabo. Después de un tiempo, empecé a recoger los pelos y colocarlos en la funda de almohada de mi amiga por si él se quedaba a dormir. Rompieron al poco tiempo y ella dijo que le parecía que él era raro porque “ponía el vello púbico en la funda de la almohada”. No le dije que era yo".
17. Esta toalla sucia:
"Llegué a casa una mañana a las 7 a. m. para alistarme para el trabajo. Había una toalla en la bañera que aún estaba húmeda y tenía arena por todas partes, así que la escurrí y la colgué en el balcón del patio. No lo pensé antes de hacerlo, pero más tarde le pregunté a mi compañera de cuarto si se había divertido en la playa. Confundida, respondió: “No fui a la playa. Mi novia y yo probamos cocaína anoche y vomitamos en la bañera”".
18. Este desastre de cita:
"Fuimos a cenar y él pidió un trago junto con los aperitivos. Todo bien hasta ahí. Varios tragos después, empezó a hablar de su exesposa y de lo “perra” que era. A medida que pasaba la noche y sin cambiar el tema de conversación, se emborrachó aún más hasta que finalmente confesó que intentó contratar a alguien para asesinar a su exesposa. Ya estaba todo planeado, pero resulta que no tenía el dinero suficiente para pagarlo".
—Tonya Welch, Facebook
19. Esta clienta antihigiénica:
"Una mujer vino a la peluquería para teñirse el pelo. Cuando la estilista dejó el puesto para ir por algo que necesitaba, la mujer tomó el peine que le quedó en el pelo y se lo metió por el culo. Ella seguía sacando y metiendo el peine, ¡incluso cuando la estilista volvió! La estilista echó a la mujer y desinfectó el peine. Estaba tan asqueada que dejé de ir a esa peluquería para siempre".
20. Este tampón en la escena del crimen:
"Me estaba haciendo las uñas con mi prima antes de su boda y mi tampón empezó a salirse de repente. Corrí incómodamente al baño, estaba sucio, oscuro, estrecho y el lavabo NO funcionaba. El tampón literalmente voló y la sangre empezó a salir. Me las arreglé para ponerme otro tampón y detener el fluido, pero no tenía agua para lavarme. Tuve que hacerlo con papel higiénico y desinfectante de manos. Cuando volví con la diseñadora de uñas, me di cuenta de que tenía manchas rojas en las manos. Tenía mucha vergüenza".
21. Y esta ensalada mixta:
"Mi amiga siempre contaba la historia de cuando su hermano y su novia un día compraron una ensalada en una gasolinera para que él se la comiera directamente de la vagina (aún no sé por qué). Unos días después, ella fue a parar a la sala de urgencias con GUSANOS en la vagina".
Este post fue traducido del inglés.