1. Pon todos los productos de limpieza del baño en un contenedor.
2. Y llena un fregador de mano con tu limpiador de ducha favorito para dejarlo en la ducha todo el tiempo.
3. Usa una banda elástica para atar bolsas de plástico llenas de limpiador en tus grifos y en el cabezal de la ducha.
También puedes usar vinagre blanco, como en este tutorial, o utilizar un limpiador más fuerte, como en este tutorial. Eso dependerá de tus preferencias y de la cantidad de suciedad acumulada con la que estés luchando.