Estas historias muestran el acoso que las mujeres mexicanas viven todos los días en el Metro

    "Tenía 8, iba con mi mamá en la línea azul hacia el centro, un tipo eyaculó sobre mi vestido".

    1. En México, casi el 35% de las mujeres ha sufrido algún tipo de violencia sexual en los espacios públicos.

    2. En la CDMX, uno de estos espacios más recurrentes es el Metro.

    3. A pesar de que existen medidas para "evitarlo", evidentemente, no funcionan.

    4. Una de ellas es la separación de vagones, en la que se destinan los primeros tres a mujeres y menores de 12 años.

    5. Pero esta disposición tampoco es efectiva.

    6. Al respecto, la activista Cynthia Híjar hizo una denuncia, pues pidió a una policía que bajara a los hombres del vagón exclusivo y le dijeron que hacer algo "estaba fuera de horario".

    7. A pesar de que la separación de vagones debe ser, según lo dicta la Ley de Movilidad de la CDMX, los siete días de la semana, durante todo el horario de servicio.

    8. A Cynthia se han unido cientos de mujeres contando historias de acoso vividas en el Metro.

    9. Historias que sucedieron cuando estas mujeres aún eran unas niñas...

    10. O adolescentes tratando de tener un día normal.

    11. Este acoso, muchas veces, es solapado por los testigos.

    12. O por la misma policía encargada de resolver estos temas.

    13. Claro que la solución definitiva no es separarnos, sino educar, pero en estos momentos, los vagones de mujeres y menores son muy necesarios.

    14. Su funcionamiento puede ayudar a que las mujeres se sientan más seguras.

    15. Porque, al parecer, son muchísimas las que han sufrido un episodio de violencia sexual en el transporte público.

    16. Los testimonios compartidos con el hashtag #AcosoEnElMetro muestran que la manera en la que operan los acosadores y violadores, es muy parecida.

    17. Por lo tanto, las mujeres mexicanas se están uniendo para exigir que el Sistema de Transporte Colectivo Metro de la CDMX les proporcione seguridad.

    18. No, no es ninguna exageración.

    19. Son historias que suceden todos los días y nunca son culpa de la víctima.