Estas son las elecciones más caras en la historia de México, con 2,148 millones de pesos en gastos de campaña. Así que con la intención de criticar ese derroche, dos jóvenes de Culiacán, Sinaloa, crearon el proyecto Politicouture.
Se trata de una editorial de moda publicada en la revista ESPEJO en la que trabajan los creadores: Alexis Rubio, de 25 años, y César Hernández, de 28. Para esto, los dos reporteros y otros amigos recolectaron propaganda electoral durante dos meses, acudieron a algunos mítines del PRI, PAN y MORENA y obtuvieron playeras, gorras, pulseras, paliacates, mandiles, cangureras, paraguas y lonas para crear veinte atuendos.
“En particular, durante la visita de Meade al Parque Las Riberas el 10 de mayo hubo una muy buena variedad de suvenirs”, dijo César, quien enfatizó que el PRI tiene “un siglo de experiencia en esto” y que una de sus inspiraciones fue la exposición sobre propaganda política que se exhibe en el Museo del Objeto del Objeto (MODO) en la Ciudad de México.
Los jóvenes quieren motivar a más personas a crear este tipo de contenido satírico para demostrar que los partidos políticos “se comportan como cualquier marca comercial”, según César.
“En estos momentos la sociedad ya no cree en ellos ni los toma en serio y eso se puede ver en todo el contenido no oficial relacionado a las elecciones donde AMLO se puede volver un personaje de anime o Meade (como) el líder de los Thundercats. Es de risa pero la misma clase política se lo ha ganado”, agregó.
Alexis y César no buscan favorecer a ningún candidato en específico, sino ver la respuesta de la gente ante este proyecto y después buscar un lugar para exponer estas fotografías en Culiacán.
“Al ver los debates televisivos y acudir a los mítines de los candidatos te puedes dar cuenta que no son más que talk shows o eventos de estadio tipo Laura en América o el acto de medio tiempo del Super Bowl. Recuerdo que, por ejemplo, cuando vino Ricardo Anaya a Culiacán hubo un momento en donde para animar a la gente los invitaba a competir a ver quién gritaba más, hombres o mujeres, y yo creo que, bueno, eso lo puede hacer cualquier payaso en un estadio”, expresó César.