¡Ah! El famoso ingenio mexicano...
Ese que nos hace ser unas balas en la calle, unas pistolas en la escuela y unos eruditos en la cocina.
Es el mismo que nos inspira a crear mamarrachadas como esta:
¡TRÉPALE AL AUDIO!
En este país nada tiene sentido, pero todo tiene sentido. ¿Me explico?
¡TRÉPALE AL AUDIO!