23 Cosas que sólo entenderás si estás obsesionado con La Casa de Toño

    El pozole nuestro de cada día se encuentra en el lugar más deliciosamente garanchoso de la CDMX.

    1. Sabes que no hay nada más doloroso que un turno que se interpone entre tú y la comida.

    2. Especialmente cuando llegas y así se ve la entrada.

    3. Aprecias que no tienes que pedir la carta, ¡PORQUE LA MESA ES LA CARTA!

    4. Y en menos de un minuto alguien ya te dio la pluma y la comanda.

    5. No puedes pasar un segundo sin babear, porque toda su decoración abre el apetito.

    6. Aunque chance te distraes con la programación de sus televisiones.

    Hasta en casa de Toño los horóscopos tienen la razón ...

    7. Obviamente tienes tanta hambre que siempre tienes que pedir varias canastitas de totopos.

    8. Tu persona favorita de todo el restaurante es el mesero que trae las órdenes extra.

    9. ¡Especialmente cuando se trata de aguacate!

    10. Si te da sed, sus aguas frescas siempre son una gran opción.

    11. Pero sabes que no hay bebida más ganadora en su menú que un Clamatoño.

    12. Cuando finalmente llega la comida te sientes en el cielo.

    13. Aunque siempre sufres un poquito porque hay tantas opciones y muy poco estómago.

    14. Incluyendo sus quesadillas, un verdadero regalo de Dios.

    15. ¡MÁS SI ESTÁN PREPARADAS!

    16. Sus salsas son el complemento perfecto para todo lo que hay en el menú.

    17. Pero nada, nada, repito, NADA, se compara a la gloria de su delicioso pozole.

    18. En todas sus formas, variantes y sabores.

    19. Es tan bueno que en más de una ocasión has visto el fondo del plato de Casa de Toño.

    20. O seguro te ha tocado llevarte uno de estos bebés a tu casa.

    21. Pero, inexplicablemente, siempre logras hacer espacio para uno de sus postres.

    22. Por eso, siempre que te dan la encuesta de servicio sueles marcar todo como "bueno".

    23. Y serías capaz de comer ahí por el resto de tus días.