1. Te encuentras perdiendo el conocimiento incluso durante presentaciones importantes.
2. Colocas tu computadora en cierto ángulo para permitirte cerrar los ojos... sólo por un minuto.
3. Nunca se sabe dónde estarás cuando tengas la necesidad de tener una siesta...
4. A veces el simple hecho de moverte del sofá a la silla es mucho qué pedir.
5. No tienes idea de lo que trataba esa conferencia telefónica.
6. Nunca logras ver la película completa. En cualquier caso ¿¿qué significaba "Rosebud"? ?
7. Tus intentos por no quedarte dormido son... poco convincentes.
8. Hay muchas fotos de ti en los medios sociales, profundamente dormido. ¡Gracias, amigos!
9. Estar sentado nunca es tan divertido como estar acostado.
10. Siempre pagas el precio por cualquier mínima y extenuante actividad física.
11. Como la canción de Shakira, puedes quedarte dormido ¡DONDE SEA¡ ¡COMO SEA!
12. A veces puedes engañar a la gente haciéndoles creer que no estás cansado, simplemente eres una persona callada y pensativa.
13. ¡UFF! CAMINAR.
14. ¿Posiciones para la siesta? Las has probado todas. Y todas fueron impresionantes.
15. Estás plenamente seguro que las tardes soleadas del domingo fueron CREADAS para dormir.
16. Hubo un incidente donde te quedaste dormido sobre lo que fuera que estabas comiendo. En tu defensa, estabas realmente satisfecho.
17. Te has quedado dormido sobre tu amigo/pareja. Ellos quizás no lo apreciaron.
18. Darte cuenta que has seguido dormido después de que tu alarma sonó es algo que ocurre con mucha frecuencia.
Pero todo eso está bien, porque eres realmente un campeón acurrucándote.
