Mucha gente ahí fuera actúa como si el consentimiento fuera algo confuso. Pero, como está demostrando una profesora de California, es lo suficientemente fácil como para que lo comprendan los alumnos de tercero de primaria.
Liz Kleinrock es una profesora de tercero de primaria en el colegio Citizens of the World Charter School en Los Ángeles. Hace poco compartió cómo enseña a sus alumnos lo que es el consentimiento.
Un esquema que publicó en Instagram muestra una manera directa de ver lo que significa el consentimiento.
En el pie de foto, Kleinrock hacía referencia a la reciente batalla de confirmación que se ha producido con el Juez de la Corte Suprema Brett Kavanaugh.
"Todo lo que tiene que ver con Kavanaugh en las noticias me ha CABREADO mucho", dijo. "Cada vez que me frustro con el estado en el que está nuestro país me siento inspirada para enseñar a mis niños de manera proactiva a SER MEJORES. Hoy la cosa iba de CONSENTIMIENTO".
El esquema muestra varias interacciones donde el consentimiento podría ser necesario, como por ejemplo abrazos u otro tipo de contacto físico, y el lenguaje que puede usar la gente. Klenrock indica que el consentimiento suena "positivo y entusiasta", y da ejemplos de lo que la gente puede decir si no quiere dar su consentimiento.
Aunque gran parte de la conversación nacional en torno al consentimiento tenía que ver con el sexo, la lección de Kleinrock tiene que ver con acciones cotidianas.
"En realidad tiene que ver con pedir permiso para poder hacer algo", contó Kleinrock a BuzzFeed News. "No creo que sea nada complicado".
También compartió trabajos de sus alumnos, a los que pidió que escribieran sobre el consentimiento y por qué es importante.
Aunque ortografía no es perfecta, las ideas van directas al grano.
Las publicaciones tuvieron una gran respuesta en Instagram. Kleinrock dijo que padres, madres, cuidadores y otros profesores se pusieron en contacto con ella para transmitir estas lecciones.
"Está perfectamente explicado y no es solo para niños. Creo que muchas personas adultas necesitan este sencillo esquema para comprender lo que es el consentimiento", decía un comentario de Instagram.
"Soy una superviviente de 2 abusos sexuales que ha criado a una generación de niñas y tiene dos chicos de 15 años en el instituto, ¡y esto me ha hecho llorar! GRACIAS", decía otro.
"Solo hablamos de las interacciones físicas que podría tener el típico niño o niña de 8 o 9 años".
Por ejemplo, dijo, a algunos niños les gusta "chocar los cinco" por la mañana y otros prefieren que no les toquen. O, cuando un alumno o alumna la toca para llamar su atención, puede usarlo como otra oportunidad para hablar del consentimiento.
Kleinrock espera que enseñar ahora a sus alumnos acerca del consentimiento sea garantía de que estarán preparados para hablar del consentimiento sexual cuando sean mayores.
"Más adelante en la vida, en la secundaria o el instituto, ¿realmente puedes empezar a aprender acerca del consentimiento en las relaciones si no puedes aprender a controlar tus manos?" dijo.
Básicamente quiere asegurarse de que estos niños y niñas aprendan a sentir empatía y mostrar compasión los unos hacia los otros.
"Creo que es fácil comprenderlo; al igual que con todo lo demás, es cuestión de práctica y consistencia", dijo. "Van a seguir cometiendo errores y estas son oportunidades para aprender".
Este artículo ha sido traducido del inglés.