1.
El cambio fue para mi, y para nadie más.
3.
Aprendí que ningún grupo alimenticio es malo.
4.
Aprendí a comer entre comidas.
5.
Báscula, una vez a la semana.
6.
Adiós (temporalmente) a la cerveza. 😭
7.
Una comida de premio a la semana.
8.
No todo lo light es realmente ligero.
12.
La nutrióloga fue mi mejor amiga.
13.
Aprendí a celebrar mis logros.
La semana del cuerpo está dedicada a generar contenido que explore y celebre nuestra complicada relación con nuestro físico.