1. Cuelga lucecitas de navidad y fotos Polaroid contra una pared blanca.
2. Haz tu pequeña galería moderna: cuelga arte con marcos de diferentes tamaños, colores y formas.
3. Si eres amante de la caligrafía, escribe sobre una pared blanca. Recuerda empezar con lápiz y luego aplicar encima la pintura. Lo amarás.
4. Idea para los viajeros y/o soñadores: Recrea el mapamundi con cartón y coloca fotos de los lugares que hayas visitado o quieras conocer.
5. ¿Amas los días nublados? Pinta una pared con tonos grises y así los vivirás siempre. Neutralidad y elegancia.
6. La decoración perfecta para aquellos amantes de la fantasía y tranquilidad: haz un toldo colgando tela semitrasparente y pequeñas luces amarillas en el techo.
7. Recrea un original y súper cool copete de cama: con madera y pintura.
Si necesitas más detalles para lograr esta obra, aquí tienes el tutorial.
8. Cuelga tus sombreros en la pared, de esta forma no se dañan y además decoran con estilo.
9. Escribe en un lienzo grande tu frase favorita. Y listo, cuélgalo preferiblemente en una pared oscura, para mayor contraste.
10. Decora una puerta simplemente con cinta adhesiva de colores (preferiblemente tipo washi). No olvides cortarlas siguiendo este patrón geométrico.
11. Para aquellos con aire bohemio, crea una tapicería mágica colgando, detrás o al lado de tu cama, una tela con símbolos y formas espirituales.
12. ¿Qué tal si pintas una pared de azul y colocas del lado de la cama una nubecita hecha con luces?
13. ¿Quién dijo que las luces son solo para Navidad? Cuélgalas en el techo de tu cuarto y que caigan como lluvia.
14. Pinta una pared con acuarela, usando únicamente diversos tonos de azul. Sigue este patrón, no te arrepentirás.
15. Pega todo tipo de mapas en una pared. El resultado será tan maravilloso como este.
16. Y si sueles cambiar de gustos muy seguido, cubre una pared con pintura para pizarra, y decórala como quieras, siempre vas a poder borrar y hacer algo nuevo.
