1.
Para empezar, son situaciones de extrema vulnerabilidad.
2.
Nunca sabes qué ponerte para dar la mejor primera impresión posible.
3.
Antes del momento, tus oídos se llenan de consejos que no pediste.
4.
En ambos casos, la premisa es la misma: no parezcas desesperado.
5.
Si tenés que esperar, lo más probable es que esos minutos parezcan meses y estés en constante tensión.
6.
Nos vemos tentados a contar todas nuestras virtudes (incluso las que no son taaaan ciertas)...
7.
...porque hay cosas que nunca podríamos decir.
8.
Evitamos hacer una escena cuando escuchamos algo que nos decepciona.
9.
Si no estamos interesados, de todas formas vamos a tener que seguir la situación hasta que sea correcto irnos.
10.
Si estamos interesados, tratamos de hacerlo notar...
11.
...sin revelar demasiado.
12.
Al terminar no sabemos bien cómo cerrar la situación y es difícil interpretar cómo salió todo.
13.
Tratás de darte ánimo a vos mismo pensando que hiciste lo mejor que pudiste y ya no sólo depende de vos...
14.
...aunque siempre terminamos esperando ese llamado telefónico que parece no llegar.
15.
Por eso siempre es mejor ser uno mismo y si no es esta vez... no tenía que ser.
