1. Antes de ponerte unos tacones necesitas pasar por todo un proceso físico y mental.
2. La planeación emocional de cómo diablos vas a manejar ese dolor de caminar quince centímetros arriba del suelo y...
3. La duda eterna de cuántas curitas llevar en tu bolsa para las ampollas que, inevitablemente, te van a salir.
4. No hay boda que acabe sin ti en pantuflas, chanclas o simplemente descalza.
5. Sientes una furia indescriptible cuando tus tacones se quedan atorados en el pasto...
6. No entiendes como tus pies pueden estar adormecidos y en fuego al mismo tiempo.
7. Nada te sorprende más que ver a alguien caminar en tacones altos lo más casual.
8. Y esto te vuela el pinche cerebro:
9. Sabes que tus pasos son como los de un guajolote caminando sobre lava...
10. Aún no entiendes porqué tu tobillo no ha sido víctima de un esguince por tacón.
11. El segundo en el que te los pones crees que todo va a estar bien...
12. Pero tus esperanzas se van al diablo en cuanto das el primer paso.
13. Nunca te acuerdas de qué tan real se puede poner el dolor hasta que sales por la puerta de tu casa usando ese par de zancos.
14. Manejar es un reto que muchos subestiman y tú aborreces.
15. Te has visto en esta situación más de mil veces:
16. Tu clóset se ve así:
17. Eres considerablemente más torpe al usar tacones.
18. Tus amigas altas que, además usan tacones te hacen ver como un pitufo cuando te paras junto a ellas.
19. Salir en una primera cita te pone en una terrible encrucijada:
20. Pero siempre te decides por ser tú misma.
21. Porque sabes que no necesitas unos stilettos para ser la más cool.
